Usted está aquí: miércoles 31 de agosto de 2005 Política Divide a legisladores priístas la ruptura Madrazo-Gordillo

Algunos llegan a decir que la maestra actúa así por su edad

Divide a legisladores priístas la ruptura Madrazo-Gordillo

Procurar un acuerdo de último momento, plantean otros

ANDREA BECERRIL, VICTOR BALLINAS Y ROBERTO GARDUÑO

La ruptura entre Elba Esther Gordillo y Roberto Madrazo generó dos corrientes de opinión en las filas del priísmo representado en el Congreso: la primera, de rechazo a la presión de la maestra y la segunda planteó procurar un acuerdo de último momento.

El diputado Héctor Pablo Ramírez Puga advirtió: ''La escasez de argumentos jurídicos y los oscuros intereses que representa provocaron en Elba Esther Gordillo una reacción propia de su edad, al descalificar sin ton ni son a sus oponentes, a quienes no logró vencer con argumentos al interior del Consejo Político Nacional (CPN). La lideresa magisterial no va a provocar ni ruptura ni desprendimiento en nuestro partido''.

El también integrante del CPN criticó la respuesta de Gordillo al conocer que ella no concitaba la mayoría del respaldo entre los mil 220 consejeros. ''Su empecinamiento por conseguir a cualquier costo lo que desea la ha llevado a posturas que tocan la locura. Lo que vimos ayer es reflejo de un estado mental y de una edad que no garantiza nada. En el PRI no veremos división, al contrario, ahora que tenemos oportunidad de recuperar la Presidencia de la República demostraremos cohesión y no nos doblegaremos ante las amenazas''.

Por su parte el coordinador de los senadores priístas, Enrique Jackson, llamó a la cordura y a la sensatez a Madrazo y Gordillo, a fin de que este miércoles, durante la reunión del Consejo Político, se llegue a un acuerdo común en torno a una nueva dirigencia nacional representativa, ''que no tome bando'' y garantice un proceso interno que no esté sesgado hacia alguno de los aspirantes.

A su vez, el senador Manuel Bartlett advirtió que es un ''asunto de trampas y toda clase de argucias'' de Madrazo y su grupo, donde ya apareció ''con toda claridad otro personaje que se llama Carlos Salinas como parte de la tragicomedia''. Recalcó que el culpable de la crisis en que se encuentra el PRI es Madrazo, ''por querer a como dé lugar ser candidato presidencial y cerrar el camino a los demás aspirantes''. Agregó que está en contra de lo que hicieron ambos dirigentes, ya que los dos se comprometieron con las reformas de Fox. Sin embargo, dijo, tampoco es aceptable que el tabasqueño quiera ''liquidar a su compañera de fórmula'' para poner luego en la presidencia del partido a alguien a su gusto.

Entrevistado antes de iniciar la reunión plenaria de los senadores priístas, Jackson resaltó que sería una irresponsabilidad que Madrazo y Gordillo lleven a un enfrentamiento y a una posición irreductible al tricolor. ''Nos tienen que garantizar a todos que van a actuar con un enorme sentido de responsabilidad y a pensar en el partido y en el país, antes que en sus proyectos individuales.''

El asunto, recalcó, se tiene que resolver hoy, porque ''no podemos seguir en una discusión interminable para ver quiénes son los dirigentes del partido, cuando lo que está a discusión, entre otras cosas, es quién gana la Presidencia en 2006''.

Con él coincidieron los senadores Dulce María Sauri y David Jiménez, para quienes este miércoles debe haber una decisión muy firme y apegada a la legalidad interna.
Sauri Riancho insistió en el riesgo de que Gordillo acuda a los tribunales, ya que ello podría dejar sin registro al candidato presidencial priísta. El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación puede resolver que las actuaciones del Consejo Político están apegadas a la legalidad o anularlas y comenzar todo el proceso, lo que implicaría que la presidencia del PRI volviera a convocar a sesión del consejo y autorizar la nueva convocatoria, lo que lleva tiempo y es ''poner auténticamente en bandeja de plata la cabeza del Revolucionario Institucional''.

En la Cámara de Diputados, Alberto Aguilar Iñárritu, legislador cercano a Roberto Madrazo, alertó del riesgo que implica la posición asumida por Gordillo. ''Es muy lamentable que se cambie el argumento político por el epíteto. La vertiente jurídica es muy clara con la prelación para cubrir temporalmente la posición de presidente del PRI, y corresponde al CPN normalizar un acto de excepción; en lo político, Gordillo tiene que lograr los consensos necesarios entre los mil 200 consejeros para lograr su apoyo; descubrió que no tenía la mayoría necesaria y no se mantuvo en el acuerdo de no judicializar; se va por el lado de cobrar a una mayoría que no está de acuerdo con eso''.

Por su parte, Sofía Castro calificó de desvarío la declaración de la lideresa magisterial: ''Elba Esther Gordillo no representa lo que dice representar, su fuerza es reducida al interior del PRI y de ninguna manera provocará una ruptura o un desprendimiento que propicie la derrota electoral de nuestro partido. La señora ha desvariado y está a punto de enloquecer; de ninguna manera nos amedrenta, porque los priístas hemos aprendido la lección y trabajaremos en unidad con nuestro candidato''.

A su vez, el gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, partidario de Madrazo, dijo que con la decisión de Gordillo gana la militancia. En el consejo de hoy, aseguró, todo se hará conforme a la ley y a los estatutos, y no se violentará la reglamentación del partido para elegir al nuevo presidente. ''No pasa nada'', dijo.

Por otra parte, el mandatario chihuahuense, José Reyes Baeza, calificó la pugna Madrazo-Gordillo de ''disputa vana'' y llamó a ambos a privilegiar el diálogo y la negociación. ''No estoy de acuerdo, no avalo la disputa entre grupos internos del partido. No soy parte de ningún grupo ni de sectas. No voy a agarrar piedras para defender ni a uno ni a otro, ambos son mis amigos, pero me parece que estamos equivocando el camino'', manifestó.

En tanto, el gobernador de Veracruz, Fidel Herrera, dijo que esa confrontación es la ''crónica de una decisión anunciada'' y restó importancia a la fuerza del SNTE en el CPN, al decir que los delegados de esa agrupación son sólo 50 o 60. Consideró que riesgos de desprendimientos y separaciones siempre hay, pero puntualizó que en su partido no hay ruptura.

A su vez, la senadora priísta por Tamaulipas, Laura Alicia Garza Galindo, consideró que su partido no enfrenta un problema de equidad de género, sino de enconos y rencores mutuos entre la secretaria general y el dirigente nacional.

Por su parte, Carlos Flores Rico, presidente del Movimiento Territorial, aseguró que la novela priísta ya tiene el libro que le faltaba, pero consideró que Gordillo ya pasó del debate a la confrontación.

Mientras, el coordinador de los diputados del PRI en Colima, Carlos Cruz Mendoza, manifestó que las pugnas entre la cúpula priísta pueden derivar en un divisionismo interno del partido que lo llevaría a perder la elección presidencial y los comicios locales que se realizarán en varios estados del país en julio de 2006.

(Miroslava Breach Velducea, Guadalupe López, Martín Sánchez Treviño, Verónica González Cardenas, corresponsales)

 
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