Usted está aquí: domingo 19 de junio de 2005 Política Insisten PRI y PRD en echar atrás reforma a Ley del ISR

El año pasado la Cámara aprobó gravar prestaciones

Insisten PRI y PRD en echar atrás reforma a Ley del ISR

El martes delinearán la iniciativa para revertir los cambios

FABIOLA MARTINEZ

Ampliar la imagen Los trabajadores petroleros, entre los afectados con la reforma a la Ley del ISR FOTO Francisco Mata Gonz�z

El próximo martes, diputados de PRI y PRD delinearán la iniciativa de reforma con la que se pretende dejar sin efecto las enmiendas a diversos artículos de la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR) relativas a gravámenes a ingresos por salarios y en general por la prestación de un servicio personal subordinado.

"Por primera vez existe acuerdo en todas las centrales obreras del país, más allá de intereses políticos o siglas, para impedir que sean gravadas las prestaciones sociales", señaló Armando Neyra Chávez, coordinador de la bancada obrera priísta en San Lázaro.

El también dirigente sindical de la industria embotelladora y líder de la (CTM) en el estado de México aseveró que para revertir la reforma en cuestión "ya existe acuerdo firme entre los diputados priístas y perredistas".

Destacó que, "en un hecho sin precedentes, los integrantes del Congreso del Trabajo -sector obrero del PRI- y la Unión Nacional de Trabajadores cerraremos filas para echar atrás las modificaciones que lesionan prestaciones básicas como fondo de ahorro, despensa, ayuda para transporte y becas, entre otros beneficios. Por primera vez habrá una gran oposición", dijo.

La reforma a la Ley del ISR -publicada en el Diario Oficial de la Federación el 1º de diciembre de 2004- entrará en vigor el 1º de enero del próximo año. Abogados y dirigentes sindicales advierten que este hecho afecta el salario real de millones de trabajadores, al tiempo que disminuye el gravamen a las percepciones superiores a 70 mil pesos mensuales.

Además, afecta sensiblemente los ingresos de miles de jubilados que actualmente reciben cada mes montos superiores a 7 mil pesos. En este grupo se encuentran empleados en retiro de instituciones bancarias y empresas paraestatales -como Petróleos Mexicanos o la Comisión Federal de Electricidad- o privadas con alto nivel salarial y de prestaciones.

Como se ha difundido, la reforma en cuestión fue aprobada en el paquete de cambios fiscales enviado por el Ejecutivo al Congreso de la Unión en septiembre pasado. En principio, la iniciativa fue aprobada por diputados de todas las fracciones partidistas y, al llegar al Senado se le agregaron artículos transitorios que afectan diversos conceptos que hasta ahora permanecen exentos, mismos que son "bandera" de miles de contratos colectivos de trabajo.

Dirigentes del CT se pronunciaron en favor de una reforma fiscal integral que amplíe la base de contribuyentes, a fin de "no cargar todo el peso" en los trabajadores con empleo formal. Incluso, algunos opinan -como el líder de la Federación Nacional de Sindicatos Bancarios, Enrique Aguilar Borrego- que la alternativa para brindar mayores recursos al Estado es la aplicación generalizada de impuestos al consumo.

Por su parte, Roberto Ruiz Angeles, dirigente de sindicatos de industria en el estado de México y líder de la naciente Confederación Mexicana Sindical -resultado de la ruptura en la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos-, detalló que "la parte más importante de los ingresos de los trabajadores son las prestaciones sociales".

Además, dijo, éstas -principalmente fondo de ahorro y pagos por productividad y puntualidad, entre otros- resultan la única alternativa para que los obreros obtengan mayor ingreso; lo anterior, debido a las restricciones (topes) de aumentos salariales previstas para no disparar el índice de inflación.

De acuerdo con una consulta en diversos sindicatos de industria y servicios, las prestaciones que proporcionan un rango mayor de ingresos adicionales al salario ordinario son las referidas, además de ayuda para renta de casa; tiempo extra; despensa; primas dominical, de antigüedad y vacacional; ayuda para transporte y seguro de vida.

Por sectores, los petroleros reciben ayuda para gasolina y gas, mientras que la alerta en el sector bancario radica en que hasta ahora cuentan con prestaciones como aguinaldo, prima vacacional y despensa exentas por subsidio federal, toda vez que sus percepciones son más altas que la media de los empleados del sector de servicios.

Sin embargo, la principal alerta radica en el pago a jubilados, cuyas percepciones mensuales van de 7 mil a 15 mil pesos mensuales, para ex empleados, y hasta 35 mil para directivos de la banca.

Los casos se repiten en diversos sectores, de ahí la preocupación de legisladores y dirigentes sindicales por enmendar las reformas a la Ley del ISR. El encuentro entre diputados de PRI y PRD está programado para este martes, a las 14 horas, en San Lázaro.

 
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