Denuncian en carta enviada al juez del caso el golpeteo contra defensores de bosques

Avalan ecologistas el trabajo de Arreaga

La fiscalía rechaza prueba de descargo en favor del campesino acusado de homicidio

ROSA ROJAS ENVIADA

Zihuatanejo, Gro., 4 de mayo. Integrantes del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) y de Greenpace México solicitaron al juez primero de lo penal, Jacobo Gorostieta Pérez, quien lleva el caso del campesino ecologista Felipe Arreaga, acusado de homicidio, actuar apegado a derecho ''y en pleno respeto del principio de presunción de inocencia universalmente reconocido".

Los activistas señalaron al juzgador que hay un patrón de ''golpeteo político sistemático'' contra los ecologistas que defienden los bosques, y citaron como ejemplo los casos de Rodolfo Montiel -quien también es coacusado en la misma causa contra Arreaga- y el tarahumara Isidro Baldenegro.

El juez José Jacobo Gorostieta Pérez comentó por su parte que ha habido ''algunas probanzas buenas de la defensa" que "dan que pensar en la inverosimilitud" del testimonio inculpatorio, como la que demuestra que uno de los coacusados, junto con Felipe, había muerto dos años antes de que se cometiera el homicidio.

Como prueba de descargo de la defensa de Arreaga, esta tarde Mario Patrón, del Centro de Derechos Humanos de La Montaña Tlachinollan, presentó a la fiscal adscrita al caso, Leticia Marín, y al secretario del juzgado, Alberto Gómez Ramírez, un video que demuestra que Felipe estaba en el poblado Las Mesas, en una boda, el día del asesinato de Abel Bautista, lejos del lugar donde se cometió el homicidio que se le imputa.

Gómez Ramírez dio fe de que en el video citado de la boda de Armando Camacho y Teresa Gutiérrez, celebrada el 30 de mayo de 1998, cuando el contador de la película marca las 9:07 horas pasado meridiano, aparece el inculpado -Felipe Arreaga-, con bigote y pañuelo rojo al cuello y camisa a cuadros verde, junto a su esposa, Celsa Baldovinos, que lleva vestido oscuro.

La fiscal, sin embargo, asentó que en el video "pudo haber alteración", dado que la tecnología actual lo permite, por lo que afirmó que ese elemento "es insuficiente para desvirtuar las imputaciones directas que hacen los testigos de los hechos" contra el inculpado.

Mario Patrón, por su parte, solicitó ''que se otorgue valor probatorio pleno'' a la inspección judicial del video presentado, ya que el secretario del juzgado dio fe de todos los puntos solicitados por la defensa y "se acreditó que el 30 de mayo de 1998 mi defendido se encontraba en una boda". Mencionó que el video se concatena con los testimonios rendidos por otros cuatro testigos, con lo que "se corrobora" que Arreaga llegó al poblado de Las Mesas el 28 de mayo de 1998 y ahí permaneció hasta el día 30 (atendiéndose con un huesero de una lesión que había sufrido en la columna). Afirmó además que las aseveraciones de la fiscal sobre "una supuesta alteración del video son apreciaciones subjetivas", dado que ella no es perito en la materia.

Previamente Priscila Rodríguez, de Cemda, y Héctor Magallón, de Greenpeace México, entregaron en el juzgado una carta dirigida a Gorostieta Pérez, en la que ambas organizaciones ambientalistas certifican que Arreaga es "un defensor destacado del medio ambiente y, en particular, de los bosques", cuyo trabajo se remonta a años atrás. Fue secretario de la Organización Ecologista de la Sierra de Petatlán y Coyuca de Catalán y, a partir de 2002, junto con su esposa Celsa Baldovinos, creó la Organización de Mujeres Ecologistas de la Sierra de Petatlán, AC.

''El incansable trabajo ambientalista que Felipe Arreaga ha realizado en la Sierra de Petatlán es invaluable, no sólo porque ha contribuido de manera decisiva a la conservación de los bosques y recursos naturales de la zona, sino también porque ha ayudado a sensibilizar a las comunidades sobre la importancia del cuidado del medio ambiente. El trabajo de Felipe es una labor en beneficio de toda la humanidad y de generaciones futuras'', asienta el documento.

Agrega que lo anterior ha sido reconocido por importantes organizaciones nacionales e internacionales dedicadas a la defensa del medio ambiente y los derechos humanos, "por lo que resulta inverosímil que se le acuse de un crimen". Recuerda que el caso de Arreaga Sánchez no es aislado, ya que Rodolfo Montiel y Teodoro Cabrera, quienes integraban la misma organización ecologista de Felipe, "también fueron injustamente encarcelados y después de más de dos años de prisión liberados por una orden ejecutiva del presidente Fox".

El juez Gorostieta Pérez comentó que han llegado muchas cartas de apoyo que avalan la conducta y el trabajo de Felipe Arreaga, "lo que hace pensar que es una buena persona" y que "puede haber una buena resolución", pero advirtió que habrá de comparar cuidadosamente las probanzas que han sido presentadas tanto por la defensa como por la fiscalía para ver "cuáles son las más realistas" y en función de ello emitir su sentencia.