Pese a presiones mantuvo en 27 dólares la estimación del precio del petróleo

Con 25 cambios, el Senado aprobó esta madrugada la Ley de Ingresos

El techo de endeudamiento se redujo a 0.22% del PIB Fuera, el nuevo régimen fiscal de Pemex

ANDREA BECERRIL Y VICTOR BALLINAS

Pese a presiones del gobierno federal y del PAN, el Senado decidió mantener la estimación del precio del petróleo en 27 dólares por barril, al aprobar esta madrugada la Ley de Ingresos de la Federación y la miscelánea fiscal con 25 cambios, entre ellos la reducción del techo de endeudamiento de 0.3 a 0.22 por ciento del producto interno bruto (PIB), modificaciones previamente consensuadas con los diputados.

El pleno decidió también dejar fuera el nuevo régimen fiscal de Pemex, luego del rechazo de la mayoría de los senadores del PRI, los que en voz de Laura Alicia Garza Galindo alertaron en los últimos días sobre el riesgo de avanzar en la privatización de la paraestatal a través de ese ordenamiento que se incluía en la ley de derechos.

Fue una jornada larga; la Comisión de Hacienda sesionó prácticamente todo el día entre presiones de cabilderos de empresarios e industriales y de las autoridades hacendarias. Hubo varios recesos y fue cerca de las 10 de la noche cuando empezó la discusión del paquete fiscal.

Voto conjunto de PRI, PRD y PVEM

PRI, PRD y PVEM votaron juntos para aprobar una Ley de Ingresos en la que se respetó la proyección para 2005 del precio del barril del petróleo en 27 dólares, que se formuló en San Lázaro, únicamente con la recomendación a los diputados de que el diferencial de 4 dólares en relación con la propuesta original del Ejecutivo se destinen, no a gasto corriente, sino a proyectos de inversión en infraestructura educativa y de salud.

Por lo que se refiere a la reducción del déficit fiscal, tanto el senador del PRI Alejandro Gutiérrez, como el perredista Demetrio Sodi, resaltaron que la disminución de recursos es mínima, de apenas 6 mil millones de pesos, al proyecto de un billón 824 mil 244 millones de pesos que presupuestó la colegisladora. Además, precisaron los legisladores, el menor déficit fiscal dará certeza a la comunidad internacional de que México avanza. Con esa nueva cifra se autoriza al gobierno federal un techo de endeudamiento externo de 132 mil 665 millones de pesos.

Desde temprano, el presidente de la Comisión de Hacienda, el panista Fauzi Hamdan, adelantó que su fracción se abstendría de votar, pero al final sufragaron en favor.

Entre los cambios que el Senado hizo a las ocho minutas que conforman el paquete fiscal destacan diversas modificaciones al impuesto sobre la renta (ISR), en beneficio de empresarios y de otros contribuyentes.

Se modificó el artículo 3 fracción C del impuesto sobre la renta, uno de los puntos más controvertidos, que se refiere al gravamen sobre inventarios establecido por los diputados. Los senadores lo cambiaron y ahora las empresas pagarán sobre sus ventas finales, no sobre los inventarios, y además ampliaron el periodo de amortiguamiento hasta 13 años.

Es decir, los diputados habían establecido un plazo de 4 a 7 años para el pago de ese gravamen y los senadores lo ampliaron 6 años, a fin de que el plazo sea hasta 2016, en una especie de "pirámide de amortiguamiento", para que los empresarios no tengan presiones sobre sus flujos de inversión.

El senador priísta Alejandro Gutiérrez precisó que los empresarios deben estar muy tranquilos, toda vez que esa reforma propiciará una mayor competitividad, pues se mantiene además la reducción del ISR a una tasa de 28 por ciento y permite deducciones por el reparto de utilidades. "Son mecanismos que permiten a las empresas seguir invirtiendo y generando empleos."

Otro de los cambios de fondo que el Senado hizo al paquete fiscal fue el de establecer tasas diferenciales del ISR para personas físicas, de tal manera que pagará más quien más gana.

Se eliminó la exención del pago de IVA a pequeños contribuyentes, por considerarla inconstitucional. El senador Gutiérrez explicó que hay una resolución de la Suprema Corte en ese sentido, por lo que de haber mantenido tal disposición se habría puesto en riesgo la recaudación total de ese impuesto.

El Senado mantuvo el endeudamiento de mil 700 millones de pesos para el Gobierno del Distrito Federal, pero etiquetó esos recursos para destinarlos exclusivamente a inversión en el Sistema de Transporte Colectivo (Metro).

La discusión del paquete fiscal comenzó a las 21:30 y el primer debate se dio en torno al artículo 8 de la Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que se refiere a la exención fiscal para las bebidas y refrescos que utilicen como edulcorante únicamente azúcar de caña.

El senador priísta Esteban Angeles Cerón propuso cambiar ese artículo a fin de que la exención fuera de 85 por ciento para quienes utilicen azúcar de caña y el restante 15 por ciento de alta fructosa con maíz nacional, pero no tuvo éxito, aunque la votación fue muy cerrada: 46 a favor y 52 en contra.

Se discutieron luego las leyes de Derechos, del IVA, del ISR y al final la de Ingresos.

Es la tercera vez que el Senado regresa con cambios el paquete fiscal a la colegisladora. En esta ocasión, sin embargo, la negociación se dio entre fuertes presiones de las autoridades hacendarias, que se apersonaron en Xicoténcatl desde el lunes para tratar de modificar la estimación del precio del petróleo y la disminución del déficit. No fueron los únicos.

Los senadores de todas las fuerzas políticas que integran la Comisión de Hacienda estuvieron como nunca sujetos al apremio de empresarios e industriales que, de manera personal o a través de sus cabilderos, trataron de influir en la modificación de algunos de los ordenamientos.

Todavía ayer se vio a representantes de Ricardo Salinas Pliego, de Grupo Modelo, de industriales de la carne y la leche y de productores cañeros y de maíz amarillo.

Los dirigentes de los organismos cúpula del sector privado, entre ellos del Consejo Coordinador Empresarial y de las confederaciones de Cámaras Industriales y Nacional de Cámaras de Comercio, fueron recibidos por los senadores el martes pasado, pero siguieron presionando hasta el último momento, ya sea por teléfono o directamente.

El miércoles y el jueves, tanto el panista Fauzi Hamdan como el priísta Alejandro Gutiérrez y el perredista Demetrio Sodi eran acosados por los cabilderos. ''šYa les dije que no, no va a haber cambios!", gritó ya muy molesto el primero a tres personas que a toda costa buscaban influir de última hora en uno de los dictámenes.

"Hay que poner orden, porque a cada momento nos caían decenas de cabilderos, que si bien hacen su trabajo, interfieren en la labor legislativa", comentó Sodi.

Al cierre de esta edición faltaban por discutir varios puntos, entre ellos la propuesta del senador del PRI Oscar Cantón Zetina de no aprobar una partida de 2 mil 500 millones de pesos contenida en la Ley de Ingresos por concepto de desincorporaciones. El legislador advirtió que no se especifica qué empresas públicas serán vendidas, pero todo parece indicar que se trata de Mexicana de Aviación y Aeroméxico, las que se pretende entregar a una trasnacional.

Igualmente, se discutió la propuesta que el senador del PAN Javier Corral Jurado llevó ante el pleno a fin de incentivar la producción del cine mexicano, a través de una deducción del ISR por concepto de aportaciones a producciones cinematográficas.

Antes, Corral Jurado presentó su planteamiento a la Comisión de Hacienda, con diversos argumentos centrados en la necesidad de respaldar al cine mexicano. Ya de madrugada insistió ante el pleno y logró la aprobación de su propuesta.