México D.F. Miércoles 25 de agosto de 2004
Pide Panamá a Cuba la salida de su embajador
del país
Admite Moscoso que analiza indulto de Luis Posada Carriles
REUTERS, AFP Y DPA
Panama,
24 de agosto. El saliente gobierno de Panamá pidió hoy
a Cuba que retire a su embajador Carlos Zamora, y reconoció que
"está considerando" el indulto del "terrorista" cubano Luis Posada
Carriles y sus otros cinco cómplices, quienes purgan aquí
condenas de prisión por su participación en un complot para
asesinar a Fidel Castro.
Al acentuarse la crisis diplomática entre ambas
naciones, a pocos días de que la presidenta Mireya Moscoso concluya
su periodo constitucional el próximo primero de septiembre, cuando
asume Martín Torrijos, el canciller panameño, Harmodio Arias,
subrayó que estas medidas no significa que las relaciones bilaterales
estén rotas.
Cuba advirtió el domingo que romperá relaciones
"automáticamente" con el gobierno de Moscoso si indulta a Posada
Carrilles y cinco cómplices -cuatro de origen cubano y uno panameño-,
acusados y encarcelados en Panamá después de que la justicia
local confirmó una denuncia hecha por el mandatario sobre los planes
de los anticastristas para asesinarlo durante la Cumbre Iberoamericana
de noviembre del 2000.
"Cuba responderá en su momento oportuno", dijo
Zamora tras ser notificado de la protesta oficial del gobierno panameño.
El diplomático acudió con rostro adusto y sereno a un llamado
del canciller panameño pa-ra recibir la nota de protesta ante la
denuncia del gobierno cubano sobre el posible indulto a Posada Carriles
y cómplices.
Moscoso "ha sido muy clara y dijo que no había
pensado (en indultar a los terroristas), pero que después de las
acusaciones hechas por La Habana ahora lo está pensando", justificó
el canciller Arias.
El gobierno de la presidenta saliente citó el lunes
de regreso a su embajador en La Habana, Abraham Bárcenas, y ahora
pidió la salida del embajador cubano aquí.
En ese contexto, Zamora, quien abandonará Panamá
en las próximas horas, evitó hacer mayores comentarios sobre
el conflicto planteado por el posible perdón oficial a los anticastristas
Posada Carriles, Guillermo Novo, Gaspar Jiménez y Pedro Remón,
dos de ellos condenados a ocho años de prisión y los otros
dos a siete, así como del panameño César Matamoros.
Asimismo, los nexos se habían enfriado en el actual
gobierno por su negativa a extraditar a Cuba a Posada Carriles.
En tanto que sectores obreros y estudiantiles panameños
hacían preparativos para una protesta en relación a los cinco
condenados, la cancillería panameña dejó abierta la
posibilidad de que el presidente Castro pueda asistir a la toma de posesión
del presidente electo Martín Torrijos.
Analistas y juristas panameños advirtieron a la
opinión pública sobre la problemática que heredaría
Torrijos en caso de darse el rompimiento, por lo que abogaron en favor
de que las relaciones diplomáticas entre Cuba y Panamá deben
ser salvadas.
Carlos Guevara López, ex negociador de los Tratados
del Canal de Panamá, solicitó a Moscoso que evite esta crisis.
Dijo que si bien el perdón a los prisioneros en cuestión
es asunto interno panameño, subrayó que cuando se traslada
a autores de planes para matar a otro gobernante la decisión afecta
a aquel país y requiere prudencia.
Por último, Moscoso dijo este martes que Cuba tiene
que ofrecerle "disculpas" a su país, como paso previo para normalizar
las relaciones diplomáticas.
La presidenta afirmó este martes que en Cuba "se
violan los derechos humanos y se mata, y Panamá no critica a Cuba
por respeto" a las normas diplomáticas.
|