México D.F. Miércoles 16 de junio de 2004
El ingreso violento de los blanquiazules
a la sede de los poderes, origen de la gresca
Riña entre manifestantes panistas y guardias
del Congreso de Chihuahua
Buscaban entregar petición de juicio contra Patricio
Martínez por omisiones en materia de seguridad
MIROSLAVA BREACH VELDUCEA CORRESPONSAL
Chihuahua, Chih., 15 de junio. Una manifestación
de alrededor de 200 panistas que protestaron contra la falta de seguridad
en Chihuahua terminó en una gresca con guardianes de la sede de
los poderes Ejecutivo y Legislativo, cuando diputados de esa filiación
pretendieron entregar al Congreso local una solicitud de juicio político
contra el gobernador Patricio Martínez, a quien culpan de omisiones
en esa materia.
Portando
pancartas y coreando consignas contra el gobernador, por los problemas
de inseguridad que vive el estado, panistas encabezados por su dirigente
estatal, Manuel Tarín Baca, efectuaron una marcha que partió
del parque Lerdo, situado a cinco cuadras del edificio de gobierno, donde
también se ubica la sede del Congreso local.
Al enterarse que pretendían llegar al edificio,
la Secretaría de Gobierno ordenó cerrar el inmueble. Los
legisladores y militantes del PAN ingresaron entonces por la fuerza.
Tarín Baca aseguró que lo único que
pretendían era entregar al Congreso una solicitud de juicio político
contra el jefe del Ejecutivo estatal, debido a que no ha podido contener
los constantes abusos de autoridad, corrupción y probados vínculos
de funcionarios y altos mandos de la Policía Judicial del estado
con el crimen organizado.
La solicitud está firmada por los diputados Oscar
González Luna, Elsy Paz, Víctor Estala, Arturo Zubía
y Horacio Rivera, además de los legisladores federales panistas,
Gustavo Madero y Fernando Alvarez.
En el documento, los panistas enumeraron nueve puntos,
en los cuales describen las causas que, en su opinión, son suficientes
para enjuiciar al gobernador de Chihuahua, entre las que resaltan "actos,
omisiones y violaciones graves y sistemáticas a las garantías
individuales y sociales"; violaciones graves a la Constitución local
y diversas leyes que de ella se derivan, causando daños y perjuicios
graves al estado, los municipios y a la sociedad, en perjuicio del funcionamiento
normal de las instituciones.
Al
gobernador se le adjudican omisiones y violaciones en el desempeño
de sus funciones, contrarias a los intereses públicos esenciales;
alteración de los planes, programas y presupuestos de la administración
pública estatal y las leyes que determinan el manejo de los recursos
económicos, ocasionando daño al erario del estado.
Los diputados alegan que el gobernador incurrió
en ataques a las instituciones democráticas, a la forma de gobierno
republicano, representativo y popular, a la división de poderes,
así como a la libertad, organización política y administrativa
de los municipios.
En un comunicado de prensa, el Comité Estatal panista
aseguró que los manifestantes sólo respondieron a la violencia
de los guardias del palacio de gobierno, quienes supuestamente arremetieron
contra los legisladores, sin respetar su fuero.
Cuando finalmente lograron ingresar, los manifestantes
interrumpieron la sesión legislativa, gritando consignas contra
el gobernador, luego de lo cual se marcharon a formar una cadena humana
alrededor del inmueble que duró escasos minutos, antes de dispersarse.
Víctor Valencia de los Santos, el priísta
presidente del Congreso local, aseguró que interpondrán denuncias
contra Tarín Baca, dirigente del PAN, y otros tres legisladores
que ingresaron violentamente al recinto parlamentario.
Informó que la solicitud de juicio político,
recibida finalmente por la Oficialía Mayor del Congreso, será
analizada y de tener sustento legal se procederá a integrar la comisión
especial que emitirá un dictamen.
|