El combo se presentará mañana, a las 16 horas, en la Plaza de la Constitución; abrirá Antidóping

Panteón Rococó: volvimos a ganar el Zócalo; hagamos un domingo chido

El grupo exhorta a los jóvenes a no alocarse y no caer en provocaciones para no perder nuevamente ese espacio

El ska es el sonido de la nueva cultura urbana de la ciudad de México, afirman la chilanga big band

ARTURO CRUZ BARCENAS

Al grito de "¡Compañeros, al Centro de México!", el grupo skasero Panteón Rococó invita a la banda que lo ha seguido desde hace nueve años al concierto que ofrecerá mañana en el Zócalo capitalino, al aire libre, pero pide "no alocarse", pues los camposanteros han pugnado en varias instancias porque el rock tenga derecho de oírse en las plazas públicas.

En entrevista, Dr, Shenka (voz, sampleos, programación y coros) y Tanis El Bambino (conga, zurdo, percusiones de mano y cajón peruano) expusieron la importancia de conservar el Zócalo como espacio para grupos como Maldita Vecindad, Los de Abajo y ellos mismos. "Ese espacio ha estado cerrado para nosotros, a pesar de que lo abrimos hace años a esta propuesta", precisó Dr. Shenka.

La fiesta comenzará a las cuatro de la tarde con la actuación de Antidoping. "El Zócalo es representativo de muchos aspectos de la lucha social, del rock nacional, del espectáculo y de la cotidianidad. Es el corazón de nuestra ciudad y no nos hubiera gustado que nos lo cerraran por lo que dice nuestra canción La ciudad de la esperanza".

La ciudad de la esperanza fue compuesta antes de los videoescándalos. Pareciera que critican al gobierno de Andrés Manuel López Obrador, pero Dr. Shenka aclaró que no es así, sino que se trata de una crítica a todos los capitalinos, los cuales no hacen nada por su urbe y se la pasan quejando.

"Hubo un entendimiento con las autoridades de cultura del gobierno de la ciudad. Logramos el Zócalo. Es un logro porque está concesionado a CIE (Corporación Interamericana de Entretenimiento) y sólo se presentan ahí espectáculos grandes.

"Si nos hubiéramos arreglado con CIE para estar en el Zócalo no nos hubiera gustado tanto. Le hubiera restado importancia. Lo trascendente es que volvimos a ganar el espacio, para que todas las bandas volvamos a estar ahí, para los que no estamos en el rollo del programa Dfiesta, porque nos consideran agresivos".

Aclaró que su próxima actuación en la histórica plancha fue más bien por su insistencia "con gente que conocíamos de cultura y del gobierno de la ciudad. Les preguntamos que por qué no teníamos el apoyo si antes sí nos tomaban en cuenta, cuando tocamos en la campaña de López Obrador.

"¿Por qué creen que es riesgoso? Optamos por llevar la logística y que ellos nos apoyen, para dar seguridad. Seguro que la banda le va a caer; además, ese día va a ser el partido de Pumas-Chivas. El concierto puede ser un buen pretexto para la banda, para que celebren en el Zócalo. Puede ser un domingo bastante chido. Les pedimos que cuiden el espacio".

-Si no se comportan adecuadamente, ¿se volvería a cerrar el Zócalo para ustedes?

-Ese es el temor. Nos quejamos de la falta de espacios, pero los chavos no son tontos y saben lo que se debe hacer. No deben caer en provocaciones con la policía, ni ir a atracar al vecino o a quien está disfrutando el concierto con la familia.

"Vamos a hacer un repaso de lo que fue el concierto del Salón 21, hace dos semanas, en la presentación del disco Tres veces tres, donde el espacio es costoso para la banda. Ya hemos estado en el Zócalo y no ha habido incidentes".

El Panteón ha dado conciertos en Europa, donde les han comentado lo impactante que es la plaza. "Simboliza un encuentro de muchos clanes. Cantar una composición como La ciudad de la esperanza retoma cierto simbolismo".

Tanis: "La ciudad de la esperanza fue una crítica a nuestra ciudad, a todos nosotros".

''El ska no va para abajo''

-¿Cómo está el movimiento ska? Se dice que va para abajo.

Shenka: "Lejos de ir para abajo se están constituyendo bandas mucho más concretas. Habemos unos más crecidos que hemos ido madurando nuestro sonido. Cada grupo ha agarrado su carrera, como Sekta Core, La Matatena y otros, pero hay una escena subterránea que está haciendo un ska más tradicional, más apegado al jamaicano.

-¿Culturalmente qué aporta el ska?

Tanis: "¿Agricultura? Jajajá. El rock es cultura y el ska es agricultura, como dicen los de Molotov. No, en realidad es un movimiento cultural, como el de la salsa. El ska es una mezcla. Viene siendo como una cultura urbana de la ciudad de México".

Shenka: "Es un movimiento juvenil y contracultural. De repente la generación que escuchábamos a Santa Sabina, La Castañeda, La Lupita, se dijo que eso ya no le gustaba tanto y empezó a diversificarse en bandas de surf, garage, punk, en fin. Muchas nacieron del Multiforo Alicia, como nosotros.

"Los chavos nos adoptaron. Esto es como un rollo social. Los chavos de la generación equis, la que ya no tenía futuro y que sólo puede trabajar en Mc Donalds o Burger King, encontraron grupos como Panteón.

"Soy un hijo de la crisis, así se reconocen. Son de una generación que ya no vio a Don Gato, sino a Mazzinger Z, y eso genera otro tipo de pensamiento y necesidades. Reflejan la violencia del momento y con todo eso se da el ligue con el ska, con los jóvenes que se vieron en medio de un mar de nada, de no oportunidades, de rechazo social y en sus casas, de que el sistema no cumple sus expectativas de vida.

Tanis: "No es que el ska sea sólo para jodidos, para olvidados. Pega más en ellos y les llega. Lo que sucede es que esta música ha sido parte de la concientización de los jóvenes, para no quedarse parados al oír una canción.

"Se trata de caminar. Hay gente que realmente está luchando por acabar con toda esta situación de pobreza y marginalidad. La carencia -uno de sus principales éxitos- se escuchó y tomó muchas discoteques. Obreros nos dijeron de ella que está cabrón, que es la neta. A veces sentimos la música así. Llega más a ese sector marginal".

El Panteón se irá de gira por Europa el 28 de junio. Estará dos meses fuera y darán unos 50 conciertos. El Panteón está vivo.