Abrirá el proyecto Radar como parte del Festival de México en el Centro Histórico

Xenakis, Satie y Cage, visionarios de la experimentación sonora: Dj Spooky

Muy cercano, el puente entre las músicas clásica y electrónica, considera el diyéi

En México se debe entender que no hace falta copiar, sino asimilar la cultura propia

JUAN JOSE OLIVARES

La música electrónica, es decir, la cultura del dj está ligada a la sonoridad clásica de una manera que a la que músicos visionarios de la experimentación sonora como Iannis Xenakis, Erik Satie, Olly Wilson, Karlheinz Stockhausen, John Cage, estuvieron apuntando a lo largo del siglo pasado.

Así lo asegura en entrevista el artista conceptual, escritor y diyei neoyorquino Paul D. Miller, mejor conocido como Dj Spooky, that subliminal kid, quien luego de trabajar con el griego Xenakis en el disco Kraanberg, descubrió que cada vez hay más nexos entre la academia y las nuevas tendencias sonoras de la música electrónica.

Spooky, quie ha explorado, diseñado ambientes sonoros emergidos de tornamesas, softwares e instalaciones acústicas y trabajado con músicos de academia, jazzistas y otros alquimistas acústicos (además de hacer bandas sonoras para películas), presentará el sábado 13 en el salón Los Angeles un set de piezas mezcladas de Iannis (incluyendo Kraanberg), dentro del contexto de Radar: espacio de exploración sonora, incluido en la versión 20 del Festival de México en el Centro Histórico.

''La idea más importante que surgió en mí es que ahora más que nunca hay un puente más cercano entre la música clásica y la cultura del diyéi, algo que gente como Iannis Xenakis y otros idealistas percibieron desde las primeras décadas del siglo XX", afirma a La Jornada Dj Spooky, quien por cierto ha presentado su arte multimedia en diferentes museos del mundo, incluyendo el ex Teresa Arte Actual.

Utilización de softwares

Spooky habla de su experiencia de colaborar con la pieza de Xenakis, icono de la vanguardia europea: ''Fue un honor trabajar con un artista visionario, que comprendía la cultura contemporánea y que me enseñó que toda esa energía que tenemos alrededor nuestro puede ser usada para crear arte sonoro.

''No podría describirte esos momentos; es uno de mis compositores favoritos, uno de mis héroes. La música es una manera de interpretar la realidad del mundo que vivimos, como lo hizo Xenakis, que creó lazos de multiculturalismo, arquitectura, alta cultura científica y, en un sentido idealista, intentó desarrollar una comunicación entre diversos grupos étnicos y generaciones."

Abunda: ''El se concentró en la similitud de fisicalidad y metáfora, sonido organizado al borde del ruido y su traducción a símbolo. Por eso creía en la absoluta similitud de códigos matemáticos y notas y subnotas musicales".

Este chico subliminal asegura que Xenakis intentó hacer una música que, mediante la exploración de las formas de sonidos, pudiera retratar las cualidades emotivas de un mundo absurdo, donde el rascismo, los conflictos étnicos y las traiciones humanas crearon uno de los más terroríficos siglos en la historia de la humanidad.

''Su música es pionera de otros desarrollos conceptuales que ocurren en nuestro tiempo y sociedad. El desarrollo en los espacios sonoros de Xenakis fueron creados a partir de formas matemáticas", dice el diyéi, autor de varios discos y remixes estructurales, que los críticos dieron el nombre de la corriente Illibient.

Luego de colaborar con artistas como Ryuichi Sakamoto, Butch Morris, Yoko Ono, Amiri Baraka o el propio Xenakis, That subliminal kid (nombre extraído de la novela Nova express, de William S. Burroughs) es consciente de que muchos ''no han entendido estas uniones. Hay músicos radicales que no han comprendido estas nuevas formas; quizá tengan razón. Todavía se tiene prejuicios con la electrónica, el hip hop, pero creo que cada vez habrá mayores acercamientos, como los que hicieron Stockhausen o Xenakis, quienes comprendieron aspectos como la relación entre la ciencia y la cultura, entre las matemáticas y el arte de la música, que fue lo que originó una de las músicas más eclécticas y mágicas del siglo XX".

Reitera Spooky: ''Cada vez más los amantes de la música entienden esos contactos, que son sólo otra forma más de comunicación. La gente debe asimilar que el mundo está cambiando, y que la música es un arte en constante evolución. Todo músico ahora está usando softwares como herramientas de trabajo, porque entienden la cultura de las computadoras."

Evolución hacia opciones más estéticas

-Parece que la música electrónica ha tenido muchos avances, pero también cierto tipo de ésta, la del mainstream, ha entrado en un estado de mercadotecnia avasallante.

-Hay muchos patrones que se quieren copiar de los modelos europeos y de las reuniones de música electrónica que normalmente se hacen allá, pero por ejemplo, en México necesitan entender que no deben copiar, sino asimilar su entorno cultural y extraerlo.

''No necesariamente esa música electrónica del mainstream es mala, pero debe ser tomada como tal y no basarse en ella para reproducir otra igual. Creo que luego de tres veces en las que he estado en México, me he dado cuenta de que la gente comprende las diferentes formas de la música electrónica y su evolución natural hacia lados más estéticos.''

-Alguna vez, usted dijo: dame dos discos y crearé un universo. ¿Tiene la obsesión-necesidad de recoger fragmentos de diferentes culturas para desarrollar sus mundos sonoros?

-Lo he hecho a lo largo de diferentes colaboraciones que he realizado desde hace más de 10 años. La música son pedazos o fragmentos de todo lo que nos rodea. Lo que yo hago es una mezcla de sentimientos de diversos grupos y sus forma de expresión. Mi música es una recontextualización de ideas, formas, sonidos. Al final, la música es una lenguaje universal en constante reciclaje.

Spooky tiene en mente continuar trabajando con algunos diyéis y otros músicos clásicos.

''Tengo en mente a varios con los que ya he hecho grabaciones, como con el proyecto de jazz Optometry, en el que trabajé con tres de mis favoritos músicos de jazz (Matthew Shipp, William Parker y Joe McPhee) y en el que lo primordial fue el encuentro del jazz y el hip hop. La ecuación entre la cultura diyéi y la del jazz. Fue el be-bop de una nueva generación.''

Spooky, quien realizó la banda sonora de la cinta Slam (aclamada en festivales como el de Cannes y el Sundance), y autor de muchos artículos publicados en las principales revistas culturales de Nueva York, recreará las atmósferas de Xenakis sólo con computadora y tornamesas.