Rosario Guillermo expone obra en galería de Hacienda

Prejuicios impiden el auge del arte de la cerámica en México

Coatlicue, escultura de la artista emplazada en Dinamarca

MERRY MAC MASTERS

La escultura en cerámica Coatlicue, de cinco metros de altura, de Rosario Guillermo (Mérida, Yucatán) fue uno de los seis proyectos seleccionados para inaugurar en 2003 el parque escultórico Guldagergaard, del Centro Internacional de la Cerámica en Skaelskor, Dinamarca. Cada año se invitará a un escultor de diferente país para hacer una nueva pieza allí.

No son muchos los artistas que trabajan obras de gran formato en cerámica. Hace tres años, Rosario fue invitada a concursar para el proyecto danés, pues en 1998 participó en un simposio en Lituania, donde hizo obras de ese tipo. En 1985 realizó el relieve México, septiembre 1985, en una secundaria de Kecskemet, Hungría.

De hecho, ha trabajado mucho en Europa: ''La situación de la cerámica en México está llena de prejuicios. Todavía hay personas que discuten sí es durable o no, e ignoran o soslayan la realidad de que si conocemos nuestra historia es gracias a los vestigios de cerámica.

''En Europa hay un fuerte movimiento de cerámica. Allá pasa otra cosa que no ocurre aquí: un proyecto enlaza a otro. Aquí, cada vez hay que empezar de nuevo."

Todo tiene que ver con la ley del menor esfuerzo: ''Es decir, si aquí hay mucha dificultad, ya no digamos para exponer, sino para vender, y si uno vive de su trabajo, pues tiene que buscar otras plazas. Yo las he encontrado en Europa.

''Aunque mi verdadero mercado es Estado Unidos, porque allí también hay gran consumo de arte en cerámica, en particular, de escultura."

Con Territorium, Rosario Guillermo exhibe 20 esculturas de diferentes formatos en la galería de la Secretaría de Hacienda, ubicada en Guatemala 8, Centro Histórico, muestra que concluirá el domingo 7. Como su nombre lo indica, la artista ha convertido la galería en ''un espacio de tierra".

Regreso a los orígenes

La muestra resume el trabajo de Rosario Guillermo de los seis años anteriores, que implica el regreso a sus inicios, es decir, al color natural de la tierra: ''Cuando empecé en 1984 trabajaba sólo la tierra modelada y quemada sin ningún tipo de decoración.

''Luego durante mucho tiempo pinté sobre las esculturas. En 1996 dejé eso porque como que uno va conquistando terrenos y sentí que había dominado el color. Regresé a mis orígenes.

''Todas las piezas de Territorium -la curaduría es de Ingrid Suckaer- son básicamente el color natural de la tierra, trabajadas con diferentes técnicas muy de cerámica indígena. La mayoría de las piezas son pulidas o modeladas a mano."

La obra de Guillermo se caracteriza por ser abstracta: ''En un principio era muy geométrica. Eso está ligado a la formación escolar. Luego, uno se desprende un poco del geometrismo. De repente aparecen algunas menciones de objetos que en realidad existen como es el caso de la obra De lo cotidiano, que contiene un respaldo de silla. Suelo combinar la cerámica con la madera o con el oro. En la muestra también hay una pieza con hule".

Después de la galería de Hacienda, Territorium se presentará en Querétaro, Guadalajara y Mérida. En el teatro José Peón Contreras de la capital yucateca, la muestra inaugurará un nuevo espacio para escultura en el foyer.

Su próximo proyecto la llevará al sur de California, donde trabajará con un arquitecto de paisaje cuyos diseños tienen la peculiaridad de incorporar escultura. También está en pláticas con Grecia para una actividad relacionada con su trabajo reciente.