Nos-otros, con pintura, instalación, fotografía y música, se inaugura mañana

Marisa Lara y Arturo Guerrero hacen en muestra ejercicio de tolerancia cultural

MARRY MAC MASTERS

La palabra "nosotros", descompuesta en el pronombre "nos" y el adjetivo "otros", sirvió a los pintores Marisa Lara y Arturo Guerrero para realizar un ejercicio de tolerancia y reflexión sobre el quehacer personal y la pluralidad cultural.

La exposición Nos-otros -de pintura, instalación, fotografía y elementos musicales- que será inaugurada el martes 3, a las 19:30 horas, en Casa Lamm (Alvaro Obregón 99, colonia Roma), está integrada no nada más por obra del binomio plástico, sino también del grupo El Animal Global, un conjunto de artistas internacionales "fundado" por Lara y Guerrero. Los 15 invitados estuvieron dispuestos a compartir una temática en torno a la idea del "respeto de la diversidad entre los hombres y hacia los animales, generada por ese único hogar que es el planeta".

Sobre ese "juego lúdico", pero de gran rigor, Arturo, o Arturótl -por ser el representante mexicano-, explica que Marisa, o Maritzin, y él "invocaron" a los participantes con la idea de plantear que en el siglo XXI la globalización "allí está", pero debe enriquecerse mediante el reconocimiento de los "otros", es decir, ''los extraños, los extranjeros, los que no corresponden a nuestra mismo nivel de civilización''.

Los ''otros'' también se refiere al mundo de la naturaleza que ha sido relegado cada vez más en función de los logros tecnológicos. De acuerdo con Arturo, hay que reconquistar a los otros, pero no por medio del modelo cultural único.

Para dar con sus "seleccionados" imaginarios la pareja recorrió los cinco continentes. En el viaje descubrieron al chino Sum Zimo, la finlandesa Darta Zirred, el estadunidense Tim Rat, el alemán Lothar Metzger, la canadiense Romie Thereau, el ruso Ilia Roghesda, la hindú Siri Rala, el egipcio Omar Mahrdetama, la española Tere Damián, el inglés Marti Roger, la brasileña Risa Mara, el keniano Zao Nomu, la francesa Lara Donezeu, el australiano Math Guisher y la japonesa Samuraia Taroru.

La obra de cada quien está documentada con fotografías del autor y su biografía. Si algunos de los nombres evocan los de Lara y Guerrero, hay que tomar en cuenta que "todos cargamos un concepto del mundo, así como una versión de nuestra propia particularidad".

''Todos", asegura Marisa, quisieron trabajar con la idea de "las pieles del mundo", en este experimento "acción-ficción". Explica: "Se trata de una serie que reúne dos polos que pareciera que hoy, a la luz de las artes contemporáneas, están reñidos: los conceptos y las facturas".

Marisa y Arturo siempre se han caracterizado por trabajar al alimón. Inclusive, con la presente muestra celebran dos décadas de "complicidad artística", como señala Germaine Gómez Haro en la presentación que hizo para el catálogo. Sin embargo, nunca habían pintado "toda una serie de manera dual".

Para refrendar su condición de siameses, inclusive de freaks, y experimentar en el terreno personal, la mancuerna trabajó metida dentro de un mismo suéter. Como ninguno es zurdo, cambiaban de lado; también se reconciliaron con ese "otro" que representa la mano izquierda. Marisa retoma: "No nos interesan las recetas. En esta serie aceptamos el desafío de trabajar un planteamiento muy conceptualizado, es cierto, pero no de una manera ramplona y obvia".

Con su modo de proceder, continúa la entrevistada, "damos al traste con conceptos como la idea renacentista de que el artista es un ser imposibilitado para compartir con otro creador la realización objetual de una obra". Además de "rigurosos conceptos", la obra también está trabajada con "muchas emociones" y de manera "muy sensual". Hoy día, apunta Marisa, algunos jóvenes artistas tienen miedo a expresar sus emociones por medio del arte, porque "vivimos una época en donde se precisa el no involucrarse".

En Nos-otros se aprende a estar en la piel del otro.