Informes de inteligencia revelaron las amenazas terroristas, dicen funcionarios de EU

Intentaba Al Qaeda diseminar tóxicos o transportar una bomba en un vuelo

Continental Airlines también canceló un viaje interno ayer ante amenazas de ataques

AFP Y REUTERS

Washington, 1Ɔ de febrero. La cancelación de vuelos provenientes de Europa fue decidida, en parte, por información de inteligencia que indicaba que Al-Qaeda intentaba diseminar un agente químico o biológico a bordo de un avión, o transportar una bomba radiactiva en un aparato de carga, según altos funcionarios del gobierno estadunidense no identificados, citados por medios informativos.

Las aerolíneas Air France, British Airways y Continental Airways decidieron cancelar sus vuelos transatlánticos programados para domingo y lunes, "por razones de seguridad".

Continental Airlines también canceló un vuelo interno este domingo de Washington a Houston debido a amenazas de ataques, anunció el Departamento de Seguridad.

"Hubo información específica de amenaza contra ese vuelo", señaló un funcionario del Departamento quien solicitó no ser identificado. "Esa información fue alcanzada a la aerolínea y la compañía decidió cancelarlo".

Una portavoz de Continental Airlines precisó que el vuelo cancelado fue el que debía partir del aeropuerto internacional Dulles de Washington al aeropuerto intercontinental Bush en Houston.

Congresistas dijeron que las cancelaciones eran una medida adecuada, en razón del riesgo existente para la seguridad estadunidense.

"No pueden ser ignoradas, cuando se tiene información o datos de inteligencia respecto a que algún individuo o grupo puede tratar de sabotear o tomar control de un aparato", dijo el senador Trent Lott de Mississippi, a la cadena Fox News.

El senador demócrata Jay Rockefeller, de Virginia Occidental, dijo a la cadena que tales amenazas son difíciles de neutralizar, incluso con las actuales normas de seguridad.

"En parte es el problema de la carga que no es inspeccionada y en parte el problema de las armas biológicas, que nadie sabe realmente qué hacer contra ellas", admitió Rockefeller, el demócrata de mayor rango en el Comité de inteligencia del Senado.

Los aeropuertos de Washington, Londres y París mantuvieron alerta elevada durante Navidad de 2003 y Año Nuevo, cuando se cancelaron nueve vuelos destinados a Estados Unidos, a causa de los temores de un atentado similar a los ataques del 11 de septiembre de 2001.

Ya desde el año pasado, Estados Unidos requiere agentes armados a bordo de algunos vuelos que llegan a su terroritorio. Washington también despachó agentes a México para supervisar pasajeros y cargas con destino a aeropuertos estadunidenses. También fueron cancelados dos vuelos de Aeroméxico.

Washington comunicó nombres de sospechosos que podrían secuestrar aviones de línea para estrellarlos en objetivos en territorio estadounidense. Sin embargo los nombres encontrados en las listas de pasajeros eran solamente similares a los de los sospechosos de integrar Al-Qaeda.

Detienen a siete parlamentarios marroquíes en aeropuerto de Oregon

Por otra parte, en Seattle, siete parlamentarios marroquíes fueron detenidos el sábado durante varias horas en un aeropuerto de Oregon, luego que uno de ellos desatendió su maleta, informaron el domingo responsables locales, que calificaron el incidente como un malentendido.

"Estoy muy avergonzada. Es lamentable el tratamiento que recibieron hoy aquí", dijo Serena Cruz, comisionada del condado de Multnomah. "Son autoridades elegidas por voto nacional", remarcó. El grupo estaba listo para abordar el vuelo de las 7 horas del sábado en el aeropuerto internacional Portland, cuando Abdellah Abbassi se alejó para conseguir una taza de café, dejando su maleta de mano.

Antes de regresar, el resto de parlamentarios marroquíes abordó y alguien reportó la maleta solitaria. Cuando Abbassi regresó a recogerla, fue detenido pese a las protestas de sus compañeros, según un comunicado. El idioma fue un problema entre los viajeros y las autoridades del aeropuerto, que se alarmaron más cuando descubrieron dentro del equipaje algún documento -escrito en árabe- con el número "911". Luego descubrieron que un amigo de los parlamentarios en Dallas les había dado instrucciones de llamar al 9-1-1 en caso de que se les presentara alguna emergencia.