La Secretaría del Trabajo insiste en que sí se ha registrado recuperación salarial

Recibió aguinaldo sólo una cuarta parte de los trabajadores: Universidad Obrera

PATRICIA MUÑOZ RIOS

Aproximadamente 10 millones de asalariados en el país no cobraron aguinaldo, ya que las empresas "no les reconocen esta prestación ni ninguna otra", en tanto otros 11 millones de trabajadores que laboran por cuenta propia tampoco recibieron este beneficio, según establece un informe de la Universidad Obrera (UOM).

En tanto, la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) señaló que el incremento fijado al salario mínimo para 2004 "sólo puede considerarse una burla más para los trabajadores de parte del gobierno de Vicente Fox".

No obstante, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) insistió ayer en que sí ha habido recuperación salarial para el sector, e inclusive sostuvo que entre noviembre del año pasado y el mismo mes de 2003 mejoró el poder de compra en nuestro país.

Muy lejos de las cuentas oficiales, un informe de la UOM detalla que en realidad sólo una cuarta parte del total de trabajadores en el país recibió el pago de aguinaldo, vacaciones y otras prestaciones de ley, es decir, casi los mismos números que se tenían en el país en los primeros años del siglo pasado.

Advierte que además en los años recientes se ha elevado el número de trabajadores que laboran sin ninguna prestación de ley en 991 mil personas, porque muchos de los nuevos trabajos que se están creando se ofrecen sin ninguno de estos beneficios y aun así son aceptados, pero también la mayor parte de las plazas que se crean son o en la economía informal o bien para que las personas laboren por "cuenta propia".

"El desempleo creciente y la amenaza potencial de desocupación son utilizados como elemento de presión por los patrones para reducir sus derechos a los trabajadores, los cuales se ven obligados a contratarse en condiciones injustas e ilegales y tienden a aceptar, por ejemplo, la imposición de paros técnicos, la inseguridad en el empleo y la reducción de sus salarios, según las necesidades de las empresas", indica el análisis elaborado por Laura Juárez.

Establece que las propias cifras oficiales indican que sólo 15 millones 36 mil asalariados gozan de prestaciones como el pago de aguinaldo, y 10 millones 208 mil trabajadores contratados por salario no reciben ni éste ni ningún otro derecho establecido en la ley.

Por más de dos décadas, los obreros mexicanos han padecido la "precarización de sus condiciones de trabajo", en que la pérdida sistemática del poder adquisitivo de sus salarios, la violación a las prestaciones de ley a las que tienen derecho, la inestabilidad en el empleo, la contratación verbal o por tiempo, la mutilación de sus contratos colectivos de trabajo y los despidos masivos son los aspectos más graves, apunta el documento.

En este sentido, la UNT señaló ayer que el mísero incremento a los salarios mínimos establecido para el próximo año, que en términos reales significa apenas un peso 60 centavos adicionales por día, abona al deterioro del poder adquisitivo. Otorgar incrementos tan bajos a un salario que todavía reciben muchos trabajadores en el país es una forma de ridiculizar al sector laboral y de presionarlo para que este bajo porcentaje sirva de techo para las demandas de revisión salarial y contractual que se llevarán a cabo durante 2004, sostuvo.

Los sindicatos democráticos no aceptarán que de nuevo el gobierno establezca estos límites para las revisiones contractuales, y con todo y crisis del sector laboral pugnarán por que los aumentos del próximo año reflejen una recuperación para los trabajadores, además de que no permitirán que continúe la mutilación de los contratos colectivos, expuso la organización.

Al respecto, la Secretaría del Trabajo negó que la "estrategia salarial de la presente administración fije pisos o techos a las revisiones contractuales", y afirmó que durante el presente año hubo empresas que otorgaron hasta 10 por ciento de aumento -no menciona ninguna de ellas-. Para esta dependencia sí ha habido una recuperación del poder de compra, porque según asegura, las revisiones contractuales se han ubicado en promedio por arriba del crecimiento de los precios.

Al respecto la UOM negó que haya un incremento real en el poder de compra de los salarios, dado que el rezago que arrastran es de al menos 20 años y 70 por ciento, ya que por ejemplo "el minisalario alcanzó su máximo histórico en 1976 y desde ese año hasta 2002 ha alcanzado una pérdida de 72.2 por ciento".