Alejandra Avalos fue coronada como la reina de la unión

Celebran voceadores Navidad y el ochenta aniversario de su gremio

JAIME WHALEY

El gremio de los voceadores, el penúltimo eslabón de la cadena de producción de la prensa escrita -el último es usted, lectora, lector- estuvo de plácemes al celebrar su festival navideño.

El teatro Metropólitan fue la sede del acto y cerca de 3 mil 500 invitados, integrantes de la Unión de Expendedores y Voceadores de los Periódicos de México, AC, se pasaron unas buenas cuatro horas atentos a las rifas previas y al elenco artístico que remató Margarita y su Sonora, quien puso a bailar en los anchos pasillos del recinto a quienes sintieron cosquillas en los pies, síntoma que les empezó poco antes cuando los cumbiamberos de la Sonora Dinamita invadieron el proscenio. La celebración tuvo un doble significado, pues además de las próximas fiestas, la unión cumple ocho décadas de fundada.

Caras sonrientes, desde luego, entre aquellos que fueron favorecidos por la diosa fortuna cuando su número fue cantado por los gritones de la Lotería Nacional y salieron sea ya con un horno de microondas, ya con una televisión, ya con un refrigerador o ya con una lavadora bajo el brazo, aunque tratándose de estos dos últimos artículos, obviamente que sólo es una imaginación coloquial, pues más bien los empujaron o se los echaron a la espalda.

Un boleto, el 6,458, fue el agraciado con un auto último modelo, pero el, o la poseedora del talón no subieron a reclamar su regalo.

La fiesta musical la comenzó el grupo M-ají-3, llamado así "por picosos", como explicó tras bambalinas uno de sus integrantes, y enseguida hubo una troupé de payasos, los de la Odisea Burbujas, con especial dedicatoria para los infantes, que los hubo en buena cantidad.

Doña Esther Flores, ya jubilada, pero que voceó durante 60 años por los rumbos de Balbuena, fue una de las veteranas en asistir, con su hija Nati, quien ahora atiende su puesto en la colonia Industrial.

A sus 81 años de edad, está lúcida aunque acepta que ya su cabeza no está para acordarse. Dijo que nació en el puerto jarocho, a dos cuadras del malecón, "otro poquito y nazco en el mar".

Se lamentó de que no hubiera asistido Chayito, ese emblema de los voceadores, quizá la más famosa, por sus hazañas deportivas en carreras pedestres que le han valido el reconocimiento mundial a sus más de nueve décadas de ajetreada existencia.

Algo tiene el voceo para la longevidad pues Enrique Valencia, el secretario de la unión, recordó que hace poco murió la decana del grupo, a la fresca edad de 102 años.

Ha sido precisamente el deporte un renglón en el que han destacado los papeleros, como en el caso de Hernaldo Canchola, aún activo allá por la salida de la carretera a Cuernavaca, quien fue campeón, rememoró Carlos Pardo, de una Vuelta Ciclista de la Juventud, sin dejar atrás las hazañas en el ring del Papelero Sánchez, quien subía al cuadrilátero con su clásico gorro de papel periódico. También el baile es otra actividad en la que los voceadores han cosechado lauros, ¿cómo no pensar en Pedro Chávez o El cholo bailarín?, que dejaron huella en la duela de los salones de la capital.

La fiesta se vio engalanada con la presencia de Alejandra Avalos, quien fue proclamada como la soberana del gremio para el inminente 2004. La actriz se discutió con dos que tres canciones acompañada del mariachi.