Rinoceronte Enamorado escenifica la obra de Mauricio Jiménez, en SLP

Furor divino rescata la confrontación de Concha Urquiza consigo misma

La escritora es poco conocida pese a tener un lenguaje a la altura de San Juan de la Cruz, dice el dramaturgo

''Es una especie de tragedia onírica, un surrealismo huasteco''

CARLOS PAUL

Con dramaturgia y dirección de Mauricio Jiménez, Furor divino es una obra que retoma parte de la poesía, la prosa, las cartas y los diarios de la poeta michoacana Concha Urquiza para plantear, mediante esos escritos, la búsqueda de la divinidad.

Urquiza es un personaje muy importante en el ámbito literario mexicano, pero poco conocido no obstante ser ''una de las pocas poetas que tiene un lenguaje semejante y a la altura de San Juan de la Cruz", expresa Jiménez.

Nacida en 1910 en Morelia, Michoacán, la precocidad literaria de Concha Urquiza se inició con la lectura de clásicos españoles, griegos y latinos. A partir de los 11 años publicó sus primeros poemas en Revista de Yucatán y Revista de Revistas. Durante su juventud pasó de la militancia en el Partido Comunista Mexicano a la adopción de diversas teorías estéticas y políticas.

Personaje incómodo

En 1937, Concha Urquiza entró en una crisis que la llevó a romper con su pasado e ingresó en un convento de monjas docentes de donde se retiró pocos meses después para impartir clases de lógica y filosofía en la Universidad de San Luis Potosí. Vivió en Nueva York durante algunos años y pese a su amistad con poetas y escritores de su tiempo, nunca perteneció a grupos literarios; se interesó más bien por exteriorizar sus emociones íntimas.

Lo más importante de su producción se encuentra en El corazón preso, publicado en 1990. Urquiza desapareció a los 35 años en el mar de Ensenada, Baja California. ''Por sus últimos escritos todo parece apuntar que decidió suicidarse.

''Aunque tenemos a un personaje muy dramático, inteligente y radical -explica el creador escénico- este montaje no es una biografía, pero sí rescata su búsqueda por algo absoluto, por la divinidad. Aquí lo que nos proponemos reflejar es esa confrontación con uno mismo, de una manera divertida y conmovedora.

''Creemos que la obra es una especie de tragedia onírica, un surrealismo huasteco, pues lo que podría ser lo mejor de su literatura la escribió en San Luis Potosí", ciudad en la que Furor divino es llevada a escena.

''Para los creyentes en general, creo que Concha Urquiza es un personaje que no es muy cómodo, pues es un ser brutal, furioso, contestatario, rebelde y al mismo tiempo muy sumiso, que se atreve a exigirle a Dios de frente."

Con la compañía Rinoceronte Enamorado, integrada por Edén Coronado, Isabel Dávila, Nydia Verástegui, Alvaro Flores y como invitado Manuel Poncelis, y con escenografía de Rosa Luz Marroquín, Furor divino se presenta a las 20 horas, de viernes a domingo, en el teatro del Instituto Mexicano del Seguro Social, en San Luis Potosí, hasta mediados de diciembre, para luego reiniciar temporada durante enero y febrero de 2004.