Los ataques a dos hoteles, destinados a afectar el turismo, dice el gobierno español

Atentados de ETA en Alicante y Benidorm

Trece heridos, el saldo de las explosiones; "graves", un holandés y un alemán: autoridades

ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL

Madrid, 22 de julio. La organización independentista armada vasca ETA hizo estallar hoy dos bombas, cada una con unos 10 kilos de explosivos, en sendos hoteles de las localidades turísticas de Alicante y Benidorm, con saldo de 13 heridos, entre ellos un turistas holandés y otro alemán, quienes se encuentran muy graves.

La alerta se produjo por una llamada anónima en nombre de ETA al periódico vasco Gara y al Diario de Levante, sobre la colocación de los artefactos una hora antes de su explosión, lo que permitió a la policía acordonar la zona y evacuar a las personas hospedadas en los hoteles.

El gobierno español de José María Aznar consideró que los atentados de hoy se inscriben en la "campaña de verano" que cada año emprende la organización para afectar al turismo, uno de los sectores más importantes de la economía nacional y en una de las zonas más visitadas para esta actividad.

El proceder del supuesto comando fue idéntico en las dos acciones: en Alicante, un joven de entre 20 y 25 años, que fue identificado por la policía española como Jon Joseba Troitiño, se registró ayer por la ma-ñana en el hotel Bahía con documentación falsa, y se habría limitado a dejar una maleta en el armario de la habitación, en la que se encontraba el artefacto explosivo.

El hotel se encuentra a un costado de la sede del Partido Popular (PP) en la región, que tuvo que ser desalojado.

La deflagración afectó en forma "muy grave" a un holandés y "grave" a un alemán, quienes tuvieron que ser intervenidos quirúrgicamente y se encuentran en la unidad de cuidados intensivos. El resto de los heridos son dos suecas, dos rusas, un joven británico y una profesora española.

La explosión provocó destrozos en dos edificios, que tendrían que ser derribados, y daños más leves en la sede del PP, al sufrir graves perjuicios el despacho de uno de sus dirigentes en Alicante, Julio España.

A pesar de que la llamada anónima advirtió que la explosión se produciría a las 12:30, ésta ocurrió 20 minutos antes, lo que hace suponer a la policía que se trató de una "bomba trampa" que tenía la intención de dañar a los agentes policiales.

Esta deflagración provocó cinco heridos, cuatro de ellos agentes de la policía nacional que se encontraban en el operativo de desalojo, cuyas lesiones son leves.

Aznar consideró que el doble atentado es parte de la "cuota anual de miedo" que los ciudadanos españoles tienen que sufrir por parte de ETA, a cuyos dirigentes y militantes advirtió que desde el gobierno se mantendrá "la serenidad y la firmeza para que todos los terroristas terminen en prisión".

El ministro del Interior, Angel Acebes, confirmó la hipótesis de la "bomba-trampa" y recordó que ante la amenaza de más atentados, una vez que ETA señaló los centros turísticos como objetivos de sus acciones, se había reforzado la seguridad en las zonas con más afluencia de turistas, al poner en marcha un dispositivo especial que movilizó a 5 mil agentes.

El Partido Socialista Obrero Español señaló que "ETA no va a conseguir nada" atacando los intereses turísticos españoles, mientras que Izquierda Unida estimó que los atentados "no son una muestra de fortaleza de la ETA, sino de su aislamiento".