Buscará agua y rastros de vida en el planeta rojo; se invirtieron unos 350 mdd

Europa envía sonda espacial a Marte

DPA

Un rayo resplandece en el cielo nocturno sobre Kazajstán, truena: Europa envió su primera misión propia a otro planeta. Un cohete portador Soyuz llevó exitosamente a la sonda Mars Express desde el cosmódromo de Baikonur en camino al planeta rojo.

El proyecto de la Agencia Espacial Europea (ESA), en el que se invirtieron 300 millones de euros (unos 350 millones de dólares), tiene una doble meta.

En Marte se buscarán huellas de agua y de vida. En la Tierra se aspira a demostrar a estadunidenses y rusos que Europa se convirtió en un rival a tomar en serio en la conquista del espacio.

"Los europeos ahora también van en busca de las estrellas", dijo el director científico de la ESA, David Southwood, quien observó el despegue desde Baikonur. "Podemos estar orgullosos", agregó.

La carrera hacia Marte comenzó y también la competencia está en la rampa de salida. La semana próxima, la agencia espacial estadunidense NASA lanzará desde Cabo Cañaveral la primera de dos sondas de su Mars Rover Exploration. La segunda le seguirá en julio.

Además, la sonda japonesa Nozomi, lanzada en 1998, llegará a Marte a fin de año, con cierto retraso por problemas técnicos. Todas las misiones aprovechan el hecho de que el planeta rojo se acercará a la Tierra en agosto hasta 56 millones de kilómetros.

"La segunda vez funciona", se alegra el ingeniero ruso Eduard Roshavski en Baikonur. Después de todo, en 1996 cayó al mar una sonda rusa que iba rumbo a Marte. La ESA perdió en aquel entonces 170 millones de euros en material científico.

De los 30 intentos de la humanidad por acercarse al planeta rojo la mitad fracasó. Pero los europeos confían en que aprendieron de los errores pasados. "Creo que las posibilidades de lograr una misión exitosa son buenas", dijo Berndt Feuerbacher de la Agencia Alemana del Espacio (DRL).

La verdadera carrera por los resultados científicos y la atención pública, así como por los medios financieros relacionados con ella, comienza cuando las sondas lleguen a Marte.

En 1997 la NASA logró un cierto éxito con el móvil marciano Sojourner. Semana a semana, mucho más tiempo del esperado, el aparato con ruedas siguió funcionando hasta que quedó colgado de la roca Yogi y las baterías se agotaron.

Los nuevos aparatos de la NASA parecen patos electrónicos con cabeza y alas. No es casualidad que la agencia busque darle un nombre junto con el fabricante de juguetes Lego.

Los europeos llamaron a su robot explorador Beagle 2, en referencia al barco Beagle del investigador Charles Darwin. Se estima que aterrizará poco antes de Navidad. El Beagle 2 no se moverá, sino que estará recostado sobre Marte como una flor abierta.

El golpe técnico de los europeos es el "topo", una taladradora que puede tomar pruebas hasta 1.5 metros de profundidad y analizarlas. Se presume que allí hay rastros de agua y de posible vida.