Durante su gestión se creó el Instituto de México, a propuesta de Carlos Fuentes

La salida de Gerardo Estrada trunca el ''diseño de una política cultural exterior''

Comunicado de la SRE omite señalar objetivos de la nueva área de Asuntos Culturales

El ex funcionario causó polémica por nombrar agregados culturales sin ser diplomáticos

ARTURO GARCIA HERNANDEZ

La salida de Gerardo Estrada de la Dirección de Cooperación Educativa y Cultura -dada a conocer el lunes en un comunicado de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE)- trunca lo que en su momento el ex director del Instituto Nacional de Bellas Artes definió como el proyecto para ''diseñar una política cultural exterior que no se sujete a la mínima sospecha de propaganda política y que sirva de amplio escaparate al país" (La Jornada, 5/05/01).

Nombrado en 2001, Estrada anunció entonces la creación del Instituto de México, abierto meses después y de cuya dirección se responsabilizó Alejandra Rangel Espinosa. Ahora -de acuerdo con ese comunicado- Rangel Espinosa también fue separada de su cargo.

Las direcciones que ocupaban tanto Gerardo Estrada como Alejandra Rangel serán fusionadas en un área denominada Asuntos Culturales de esa secretaría, al frente de la cual ha sido nombrado Porfirio Thierry Muñoz Ledo, maestro en Administración Pública y Políticas Públivas por la Escuela de Economía de Londres. Estos son algunos de los primeros cambios promovidos por Luis Ernesto Derbez, desde su nombramiento como secretario de Relaciones Exteriores en sustitución de Jorge G. Castañeda.

Cooperación con la iniciativa privada

A partir de una propuesta del escritor Carlos Fuentes, Gerardo Estrada planteó crear el Instituto México, que funcionaría con aportaciones del gobierno federal y de la iniciativa privada. Al llegar a dirigir Cooperación Educativa y Cultura, dijo que ésta vivía una etapa de transición: ''Ha cumplido su ciclo histórico, es necesario renovarla y modernizarla. El modelo más cercano a lo que queremos es la creación de un instituto de este tipo. El salto que pretendemos dar es reordenar la experiencia anterior en materia de difusión cultural en el exterior y presentarla de una manera que sea más flexible, que permita la cooperación con la iniciativa privada, dificultada por la actual estructura en términos legales".

Estrada tenía como modelos la Alianza Francesa, el British Council y el Instituto Goethe, cuyo propósito es la difusión de la cultura y del idioma de sus respectivos países. El comunicado de la SRE no menciona nada sobre las funciones y los objetivos del área de Asuntos Culturales.

Luego de asumir el cargo, Estrada tuvo que enfrentar una controversia por nombrar agregados culturales que no eran diplomáticos de carrera. La mayoría eran escritores jóvenes pero también había artistas plásticos, una actriz, un locutor de radio, cineastas, productores de cine y periodistas. Algunos de los seleccionados fueron Sealtiel Alatriste, Hugo Hiriart, Jorge Volpi, Daniel Sada, Liliana Saldaña y Felipe Ehrenberg.

Interrogado al respecto, dijo que los diplomáticos de carrera no tenían interés en ser agregados culturales, pero que para serlo sólo bastaba saber ''hablar bien inglés". Otra interrogante ahora es qué va a pasar con esos nombramientos.