No hubo pronunciamiento sobre la posición de México

Naufraga en el Senado acuerdo sobre Cuba

División, no sólo entre fuerzas políticas sino entre bancadas

ANDREA BECERRIL

Los consensos nunca pudieron darse y el Senado de la República no se pronunció en torno al voto de México en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU. La división no sólo se dio entre las fuerzas políticas, sino entre bancadas, toda vez que mientras PRI y PVEM pidieron que el gobierno foxista se abstenga en la votación, y la bancada del PAN por el contrario exigió que se condene a Cuba, el PRD fue a tribuna con dos posturas antagónicas.

''Queremos que los derechos humanos sean vigentes aquí y en China, en Estados Unidos y en Cuba'', planteó la senadora Silvia Hernández. En nombre del PRI advirtió que si bien reprueban las ejecuciones y las duras penas carcelarias a disidentes, no avalan el doble rasero, el doble criterio y la politización del organismo de la ONU, que antes se negó a mandar un representante del Alto Comisionado a Irak, para analizar las violaciones a las garantías individuales en ese país devastado por la guerra.

Hubo coincidencia de todas las fuerzas políticas en reprobar la determinación de Fidel Castro de fusilar a los secuestradores de una lancha, y sentencia hasta con cadena perpetua a los opositores. Incluso, el panista Javier Corral Jurado expresó que ''no es posible cerrar los ojos ante las flagrantes violaciones a los derechos humanos que han ocurrido en Cuba, en lo que va de abril''.

Dijo incluso que la lucidez del comandante cubano ''va en declive''.

Por segundo día consecutivo se eliminó de la agenda un punto de acuerdo sobre Cuba. A diferencia del desechado un día antes, en que se proponía que el Senado demandara a Fox abstenerse de votar cualquier resolución sobre derechos humanos en la isla, el de ayer iba en sentido de exigir el voto a favor de la resolución de Ginebra, por la que se envía un representante del Alto Comisionado de Naciones Unidas a La Habana.

Este último punto de acuerdo lo elaboró la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, que preside el panista Fernando Margáin, y se incluyó en la Gaceta Parlamentaria sin haberlo consultado con los priístas, que representan 50 por ciento de los votos de esa comisión, quienes por la mañana advirtieron que no lo firmarían y exigieron que se retirara.

Sólo quedó entonces fijar posturas. Por el tricolor, Silvia Hernández señaló que los priístas reprueban las ejecuciones de tres cubanos, pero no avalan que México vote a favor de una resolución que sólo condena violaciones a ciertos derechos en Cuba, pero no incluye también una condena al bloqueo económico que desde hace cuatro décadas mantiene Estados Unidos sobre la isla, que violenta los derechos a la alimentación y a la salud de sus pobladores.

La senadora queretana cuestionó dar el aval a la resolución de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, que no quiso ver qué pasa en Irak y mantiene la selectividad de los países ''con criterios que más parecen el espejo y el ejemplo de las negocaciones y presiones de las grandes potencias''.

La senadora del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) Sara Castellanos se pronunció también por la abstención de México en la votación de Ginebra. ''Pese a que a partir del 11 de abril Fidel Castro se convirtió en el promotor más exitoso para condenar los derechos humanos en su país'', es necesario no votar a favor de la resolución del organismo de Naciones Unidas, para no provocar mayores represalias económicas al pueblo cubano, ni dar argumentos a favor de una intervención militar de Washington.

''Si bien es cierto que la propuesta de la ONU se restringe a la visita de un comisionado de Derechos Humanos a Cuba, puede derivar en otras situaciones. Recordemos que la guerra contra Irak empezó con la visita de un comisionado del Consejo de Seguridad'', añadió.

El PAN, a través de Cecilia Romero, se lanzó con todo contra el gobierno de Castro, y dijo que ''todos los que creen en los más elementales valores de la persona humana, claman porque el mundo vuelva sus ojos a Cuba y actúe''.

El gobierno de Fox, dijo, debe votar en Ginebra a favor de que un relator de la ONU constate la situación de los derechos humanos en Cuba. Exigió luego ''que sean liberados los presos políticos y que el gobierno cubano acepte las resoluciones de los organismos internacionales''. Más tarde insistió su compañero de bancada, Marco Adame, con una postura similar.

Para el PRD fue más difícil, según lo reconoció en tribuna el coordinador Jesús Ortega. ''Ciertamente este es un tema complejo, y debo decirlo con franqueza''. Como lo había expresado antes Armando Chavarría, Ortega Martínez dijo que una parte de los perredistas están de acuerdo en que el comisionado de la ONU viaje a Cuba y verifique la situación de los derechos humanos, pero que también acuda a Irak y a Estados Unidos en misión similar.

Agregó que la condena al bloqueo ''no nos hace dejar de ver el juicio sumarísismo y la pena de muerte. La gente de izquierda tenemos que decirlo, no puede tolerar los delitos de opinión. Lo decimos enfáticamente en el caso de Cuba, pero queremos que este Senado lo diga enfáticamente en todos los casos''.

Antes, el también perredista Serafín Ríos pidió la abstención del gobierno mexicano, ''para no ser comparsas''de una represión abierta de Estados Unidos contra el pueblo de Cuba.

Por su parte, el panista Javier Corral Jurado sostuvo al respecto que no es válido ''salir con que abonamos el camino a la invasión norteamericana''. No es posible, insistió, ''ser demócratas en todo el mundo, menos en Cuba; no podemos cerrar los ojos a lo que está pasando allá''.