No hay vuelta de hoja en lo que anunciamos, advirtió Guillermo Alvarez Cuevas

Ningún jugador firmará la rescisión del contrato, dijo Abreu

Los Cementeros dieron de plazo hasta el sábado para recibir una respuesta de la directiva

Para el nuevo técnico Enrique Meza, quien ayer fue presentado, ambas partes deben ceder un poco

MIGUEL ANGEL RAMIREZ

Quienes ahora pusieron la soga en el cuello fueron los futbolistas de Cruz Azul: "ningún jugador del plantel firmará esa rescisión de contrato. Estamos en pláticas con la directiva para llegar a una mejor solución, para todos estar contentos; no tenemos nada más para adelantar", anunció ayer el delantero Sebastián Abreu, quien habló en nombre del grupo.

El Loco y los otros tres elementos que se presentaron en la sala de conferencias de La Noria (Francisco Palencia, Oscar Pérez y Sergio Almaguer) advirtieron que no contestarían preguntas. Aun así se les pidió que dijeran al menos cuál fue su propuesta a la directiva.

-No hay propuesta -respondió Abreu.

Cuando los jugadores se disponían a abandonar el lugar aalguien preguntó si tenían miedo. "Pavor, tenemos, pavor", alcanzó a decir Palencia.

Algunos jugadores cumplieron lo que adelantó Abreu, de que nadie haría declaraciones. Pablo Galdames fue una de las excepciones. Aseguró que no están negociando nada.

"Nosotros nada más les dijimos que no estamos de acuerdo con la rescisión de contrato. Queremos que se respeten los convenios como los firmamos al principio del torneo."

-¿Cuál fue la respuesta del presidente (Guillermo Alvarez)?

-Nos va a responder de aquí al 15, que es el plazo, el sábado.

Los jugadores se reunieron temprano en las instalaciones del club. Después lo hicieron con Alvarez Cuevas y aunque el presidente del equipo ya conocía su postura, no lo comentó durante la presentación del nuevo técnico Enrique Meza, que, como ocurrió en la víspera con el despido de Carrillo, fue un tema que pasó a segundo término.

El presidente cementero aseguró que analizarán la propuesta del plantel, pues existe flexibilidad y "apertura de mente" entre los dirigentes.

Dijo que hay disposición, "pero entendiendo que en lo que ayer (martes) anunciamos no hay vuelta de hoja". Es decir, la rescisión de contrato y la recontratación para quien acepte las nuevas condiciones.

Según él, lo que se estaba negociando era el mínimo de puntos que exige la directiva. Porque ellos pedían 30 unidades para que los jugadores puedan cobrar el ciento por ciento, y eso implicaba no perder un solo juego en lo que resta del actual torneo.

Una propuesta es que sean más de 20 puntos y llevarse el ciento por ciento del dinero, pero no saben si con esto les alcance para el repechaje por lo menos.

Con relación a que mientras la directiva aseguraba haber entregado a los jugadores un fólder con los documentos de la rescisión y las nuevas condiciones, mientras éstos acordaron ni siquiera recibirlos, Alvarez Cuevas dijo:

"Se les entregó a los muchachos al término de la charla y debían pasar a firmar." Reconoció que nadie lo hizo, y aplaudió su unidad, pero también los criticó por no mostrarla a la hora de los compromisos.

Pese a todo, alentó la esperanza de "que todos se queden" y, precisamente por eso no han manifestado su postura sobre la Copa Libertadores.

"No se nos olvidó", reprochó, pues primero deberán ver si contarán con la gente para seguir afrontando el evento sudamericano; ahí no pueden registrar a otros jugadores.

En la Federación Mexicana de Futbol habría problemas si rescinden los contratos a los del primer equipo. No pueden darlos de baja y luego recontratarlos. Aunque para esto Alvarez Cuevas tiene una salida, pues dijo que en la FMF únicamente se haría la "modificación" del contrato.

Meza encontró un serio problema en su regreso a "casa". No obstante, manifestó su confianza en que todo llegue a un final feliz. Estimó normal la rebeldía de los jugadores, "cuando se les toca la parte económica", y para él "es cuestión de buscar la mejor solución con base en que las dos partes cedan un poquito".

Confesó que sabía lo que le esperaba y que "nunca había tenido la oportunidad de trabajar con un equipo de desempleados", pero esto le da la posibilidad de acabar con las dudas de los jugadores, "y que logren conseguir el nivel que tenían" hace tiempo.