Esperó 25 horas para que le practicaran una cesárea
Recomendación de la CNDH al IMSS por muerte de una parturienta
VICTOR BALLINAS
Por la atención inadecuada y la falta de personal médico en el Hospital de Ginecobstetricia número 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Tijuana, Baja California, donde falleció una parturienta debido a que tardaron 25 horas en realizarle una cesárea a pesar de que contaban con el diagnóstico de que el bebé ya había fallecido, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió la recomendación 1/2003 al director de ese instituto, Santiago Levy Algazi.
El deceso de la señora Laura Guzmán Soria, de 19 años, ocurrió el 27 de diciembre de 2001, y no obstante que su esposo, Héctor de la O, y su madre, Amalia Soria, presentaron denuncia ante la Procuraduría General del estado hubo dilación de la justicia por parte de servidores públicos de esa institución, quienes archivaron la denuncia por 10 meses, en lugar de dar parte al Ministerio Público Federal.
De acuerdo con la investigación de la CNDH los hechos son los siguientes: "la señora Guzmán Soria se presentó al Hospital de Ginecobstetricia número 7 del IMSS -en Tijuana, BC- el 25 de diciembre de 2001 a las 22 horas, con dolores por motivo de su embarazo. La paciente fue atendida hasta las 0:27 del día 26 de diciembre de 2001. Hora y media más tarde, la señora Guzmán Soria fue informada que no escuchaban los latidos del corazón de su bebé, por lo que le practicaron unos estudios. A las 9 horas de ese mismo día, fue informada que el producto estaba muerto, y que procederían a su expulsión mediante el uso de oxitocina. La madre de Laura solicitó le practicaran una cesárea a su hija, pero los médicos se negaron".
En el expediente clínico que el IMSS remitió a la CNDH a petición expresa se destaca que entre las 7:50 horas del días 26 y hasta las 10:00 horas del día 27 de diciembre de 2001 en que se realizó la cesárea -25 horas después de que se contaba con el informe de que el bebé estaba muerto- los reportes médicos indican que a la afectada se le aplicó oxitocina, antibióticos y antimicóticos por no presentar dilatación uterina, y se reportó infección vaginal.
En el reporte médico del 27 de diciembre de 2001, los doctores que realizaron la cesárea a la señora Guzmán Soria indican que "a las 10 horas se obtuvo un producto masculino muerto y macerado, de paciente que presentó líquido libre en cavidad abdominal (ascitis) y ausencia de contracción uterina, por lo que procedieron a realizar extracción del útero, presentándose complicaciones de sangrado en peritoneo y pared abdominal, sangrado y alteraciones de coagulación.
"Posteriormente sufrió paro cardiorrespiratorio revertido, atendido por anestesiología , y se decidió enviar a la paciente a la clínica 20 a terapia intensiva, por no contar la clínica 7 con ese servicio ni con médico internista por encontrarse de vacaciones". La paciente falleció en la clínica 20 del IMSS.
