Hay más de millón y medio de vacunas disponibles

Influenza y neumonía, noveno lugar en las causas de muerte

CAROLINA GOMEZ MENA

Alrededor de 30 por ciento de los mexicanos contrae por lo menos una vez al año alguna infección respiratoria aguda. De ellas las más severas son la influenza y la neumonía, las que representan la novena causa de mortalidad en el país. Tan sólo el año pasado fallecieron por esos males alrededor de 14 mil personas, la mayor parte de la tercera edad.

Una de las opciones para evitar contraer la influenza, en particular en los periodos invernales, es aplicarse la vacuna contra este mal, el cual cuando no es tratado de manera idónea suele derivar en neumonía.

Al respecto, el doctor Gustavo Reyes Terán, jefe del Departamento de Infectología del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) de la Secretaría de Salud (Ssa), remarcó que la medida preventiva más efectiva es vacunar contra la influenza a los mayores de 50 años y a los niños de entre seis meses y cinco años de edad.

Aconsejó vacunarse a todos aquellos que sufren enfermedades crónicas, tales como asma, enfisema pulmonar, enfermedades del corazón, de los riñones y quienes padecen diabetes, así como aquellos que tienen enfermedades concurrentes, el personal de salud y quienes tienen convivencia cercana con quienes padezcan enfermedades crónicas.

Según datos del Centro Nacional de Vigilancia Epidemiológica de la Ssa, la dependencia tiene disponibles en sus institutos (INER y de Nutrición) poco más de un millón y medio de dosis de vacunas contra la influenza. Inmunizante que contiene un virus atenuado, y que debe administrarse una vez al año, de preferencia entre octubre y diciembre.

Reyes Terán comentó que debido a que el virus de la influenza muta continuamente, es capaz de evadir la respuesta de defensa del organismo. En otras palabras, el virus que estuvo presente el año pasado es diferente en esta temporada, de modo que los anticuerpos que se desarrollaron ya no sirven para este invierno. Por eso la vacuna debe prepararse con base en el virus inmediato anterior.

Sin embargo, no todas las personas deben ser vacunadas contra la influenza, ya que hay individuos alérgicos a ciertos componentes de la vacuna, tales como el huevo, ya que el virus "se cultiva en huevo o en sus componentes".

La influenza produce síntomas similares a los de una gripe: dolor de garganta, fiebre, moco nasal, pero también presenta un cuadro más grave con dolores de piernas y brazos.

Las grandes pandemias por influenza registradas en este siglo se han dado en 1918, 1958 y en 1968, las que mataron a millones de personas. La previsión es que durante la siguiente década ocurra otra pandemia, o que en años venideros se multipliquen los casos de influenza. Por el momento la incidencia está estable.