El árbitro Felipe Ramos no marcó un penal contra Guadalajara

Chivas se repuso de la paliza; 2-1 a Veracruz

Guadalajara, Jal., 27 de octubre. Chivas se repuso de la derrota de 7-1 ante Pumas al vencer 2-1 a un conformista Veracruz, gracias a la ayuda del árbitro Felipe Ramos Rizo.

El silbante mundialista no marcó un penal contra el Guadalajara cuando el marcador estaba empatado a un tanto, en duelo realizado ante escasa asistencia en el estadio Jalisco.

Con la victoria, el conjunto de Daniel Guzmán se mantiene en la pelea por la clasificación en el mediocre grupo cuatro, al sumar 20 puntos, mientras los Tiburones Rojos siguen como el peor visitante del torneo y no aprovecharon la caída del Celaya en la tabla por el no descenso.

El cuadro jarocho se fue al frente apenas al minuto tres, en un centro de Isaac Terrazas por la banda derecha; Martín Rodríguez realizó una pantalla y el argentino Carlos Casartelli le dio un pase para dejarlo sin marca, con lo que el uruguayo sólo evadió al arquero Oswaldo Sánchez y tocó para el 1-0.

Las inofensivas Chivas tuvieron su mejor llegada al 16, en centro retrasado de Ramón Ramírez a Omar Bravo, quien mandó un tiro muy elevado.

A los 30 de acción, el defensa visitante Jesús Gutiérrez cometió una inocente falta dentro del área sobre Emilio Mora y el silbante no dudó en marcar la pena máxima, que fue cobrada por Ramón Morales a la izquierda de Manuel Máñez, quien se lanzó al lado contrario, para el 1-1.

Sólo así Veracruz se decidió a atacar otra vez y tres minutos después Matute Morales dio pase de taconcito a Rodríguez, quien lanzó un disparo cruzado.

La jugada polémica fue al 65, en una carga por la espalda de Morales al recién ingresado Fernando Arce, pero Ramos Rizo, cerca de la acción, no se atrevió a marcar.

Fue el defensa David Mendoza quien desniveló el partido al 71, al desbordar por el lado izquierdo y mandar un preciso centro al área, donde Omar Bravo conectó sólido cabezazo y marcó el 2-1 al aprovechar que Máñez quedó estático.

Los Tiburones se acercaron al 90, en un potente tiro de Casartelli que Oswaldo desvió a córner con reflejos y mantuvo la valiosa victoria.