Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Jueves 26 de septiembre de 2002
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Política

PEMEXGATE

La medida habría sido tomada a instancias de Elba Esther Gordillo

Prepara el PRI ''deslinde paulatino'' de Romero Deschamps y Aldana Prieto

Desde ayer se instruyó al CEN para ''moderar'' el discurso sobre el conflicto petrolero

ENRIQUE MENDEZ Y MIREYA CUELLAR ENVIADA

A instancias de Elba Esther Gordillo, el presidente del PRI, Roberto Madrazo, se prepara a deslindar ''paulatinamente'' al partido de los dirigentes del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), Carlos Romero Deschamps y Ricardo Aldana Prieto, y desde ayer la instrucción a los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) es ''moderar'' el discurso sobre el Pemexgate para no involucrar más al tricolor.

Fuentes del CEN revelaron que la cúpula priísta asumió que ha ido ''muy lejos'' en el respaldo a los líderes petroleros, quienes ''tercamente'' han mezclado el reclamo de aumento salarial con las acusaciones que se les han hecho por el desvío de recursos de Pemex al sindicato, donde se incluyen 500 millones de pesos para la campaña presidencial del PRI en 2000.

Anoche, esa estrategia comenzó a operar y en un comunicado suscrito por todos los integrantes del CEN, el PRI señaló que no defenderá ''la impunidad'' de nadie y advirtió que una huelga en Pemex, aun cuando es un recurso válido, sería ''definitivamente riesgosa e inconveniente'' para las actuales condiciones económicas del país, ''así como para el contexto internacional, en el que el petróleo cobra una importancia imposible de desestimar''.

Por ello, se pronunció para que, en un plazo máximo de 48 horas, empresa y sindicato lleguen a un acuerdo viable para la paraestatal y "de estricta justicia para los trabajadores".

Lamentó que los procesos judicial y de negociación laboral se hayan mezclado y confió en que ''la fuerza y validez de las pruebas'' que se discutan en la Sección Instructora de la Cámara de Diputados, y la imparcialidad de esa instancia legislativa, deriven en un proceso ''con estricto apego a derecho'' hacia los dirigentes petroleros.

Sin embargo, señaló que el PRI ''nunca ha buscado que la negociación prevalezca sobre la legalidad'', y advirtió que ''ante la ley todos somos iguales; no puede haber espacio para la impunidad. México no lo merece ni puede haber distingos de ninguna especie''.

La nueva posición del partido respecto de los dirigentes la inició el propio Roberto Madrazo, quien durante una entrevista en Piedras Negras, Coahuila, señaló: "El PRI no protege corrupción, no está a favor de la impunidad. Queremos que con la ley se aclaren todos los hechos que están en torno de este caso".

Además, conminó al sindicato a evitar el estallamiento de la huelga en Pemex, porque el paro ''le haría un daño al país e impediría que (México) cumpla los compromisos de abasto de crudo a Estados Unidos y, por otro lado, las finanzas públicas federales dependen, en una tercera parte, de los recursos que provienen de Petróleos Mexicanos''.

En el PRI se informó que a la petición expresa de Vicente Fox para que lo ayuden en la negociación con el sindicato, Madrazo ofreció al mandatario -la noche del martes en Los Pinos- continuar con la mediación ante Romero Deschamps y Aldana Prieto para que separen la demanda laboral del terreno legal o bien que los dos pidan licencia a sus cargos como diputado federal y senador, respectivamente.

Las fuentes consultadas precisaron que Madrazo no ha pedido al secretario general y al tesorero del STPRM entregarse, a cambio de una fianza reducida, sino que sólo les ha recomendado solicitar licencia, figura que no les quita el fuero, pero sí les permitiría enfrentar los cargos por uso ilegal de recursos.

El dirigente priísta les ha dicho, incluso, que aun si ganan el juicio de procedencia en la Cámara de Diputados, de todas formas la averiguación iniciada por la Procuraduría General de la República no se detendrá.

La evaluación del PRI sobre este punto es que el diputado Romero Deschamps y el senador Aldana Prieto se han ''obstinado'' en rechazar esa salida, pues consideran que perderían legitimidad ante la base laboral y, eventualmente, enfrentarían una asamblea que los releve de sus cargos como dirigentes del sindicato de Pemex.

Ambos también han rechazado las diversas opciones que les ha ofrecido el secretario general de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y del Congreso del Trabajo (CT), Leonardo Rodríguez Alcaine, quien también forma parte de la negociación directa con el presidente Fox. El martes, por ejemplo, se reunió con el mandatario antes que lo hicieran Madrazo y Gordillo.

Sin embargo, se confirmó que el dirigente cetemista ha asumido una actitud ''moderada'' hacia los líderes petroleros y no coincide con sus métodos de presión al gobierno federal.

La dirigencia del PRI, incluso, no considera que el sindicato quiera una salida negociada, pues sus líderes se empeñan en negar que hayan transferido recursos a la campaña presidencial de Francisco Labastida Ochoa, y afirman que ya no pueden devolver los más de 2 mil 200 millones de pesos que recibieron de Pemex, porque eso sería tanto como aceptar -argumentan- que sí fueron fondos obtenidos de manera ilícita.

Asimismo, ayer fluyó más información respecto del encuentro entre los dirigentes del PRI y Vicente Fox en Los Pinos. Roberto Madrazo y Elba Esther Gordillo llegaron a la residencia presidencial con la noticia de que el mandatario había declarado que los dirigentes del STPRM pretenden chantajear a su gobierno, y enterados también de la posición fijada por el secretario de Gobernación, Santiago Creel.

La primera impresión de la secretaria general -informaron fuentes de la dirigencia- fue que esa afirmación de Fox a la agencia de noticias Reuters constituía una ''traición'' presidencial, que no encajaba con la intención de dialogar con el tricolor.

Sin embargo, luego de la entrevista con el jefe del Ejecutivo, Madrazo y Gordillo analizaron el comunicado que emitió la noche del lunes el sindicato, en el que acusaron a la administración foxista de llevar al país a ''una situación de alto riesgo'' y advirtieron que ni Romero Deschamps ni Aldana Prieto solicitarían licencia como legisladores.

Ello les permitió modificar su perspectiva sobre el conflicto y ponderar que el primer ataque provino del sindicato. Así, ayer se decidió que ''la terquedad'' de los líderes del STPRM no puede seguir siendo apoyada por la dirigencia del partido y debe haber un deslinde con Romero Deschamps y Aldana Prieto, como desde el inicio de la crisis ha insistido Elba Esther Gordillo.

Mientras, en Saltillo, donde participó en el cierre de campaña de candidatos a alcaldes y diputados locales, Roberto Madrazo dijo que su partido le ha pedido ''madurez y una gran responsabilidad'' al sindicato porque, afirmó, a su cargo está la empresa más importante del país, de la cual depende el desarrollo económico nacional.

Informó que el tricolor continuará su labor como mediador en el conflicto y señaló que su partido está consciente de las implicaciones de una huelga en Petróleos Mexicanos. Por ello, agregó, seguirá impulsando el diálogo, la conciliación y el entendimiento para lograr un buen arreglo.

Cuando se le preguntó si el Partido Revolucionario Institucional se deslindará del sindicato petrolero respondió: ''Esperamos que el estado de derecho sea el que pondere y, con la ley en la mano, que las cosas salgan bien para México''.

Por la mañana, en la sede nacional priísta, y previo a la instalación de la Comisión de Energía del Consejo Político Nacional, el ex director de Pemex, Jorge Díaz Serrano, acusó a los dirigentes del sindicato de haber cometido ''un fraude'' en contra de la paraestatal.

Asimismo, los responsabilizó de utilizar la figura de la huelga como ''un arma'' en contra del país que, dijo, sufriría una ''catástrofe, una parálisis dramática, letal''.

Entrevistado en el mismo foro, el senador Manuel Bartlett Díaz calificó como ''no propio'' de un Presidente de la República el comentario que hizo Vicente Fox Quesada acusando de ''chantajistas'' a los dirigentes petroleros. ''Es un lenguaje terrible'', consideró el legislador.

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