Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Jueves 25 de julio de 2002
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Política

Dice que su gobierno aprendió la lección del pasado, por lo que rechaza la violencia

Fustiga el Presidente a los ex regímenes priístas

Ofrece "extirpar el cáncer de la corrupción"; se expresa contra tentaciones de autoritarismo

PATRICIA MUÑOZ, ROSA ELVIRA VARGAS Y JUAN MANUEL VENEGAS ENVIADO

En abierta descalificación a los regímenes priístas, ayer a lo largo de todo el día el presidente Vicente Fox expresó que su gobierno aprendió las lecciones del pasado, por lo que en su relación con los indígenas "ha rechazado la confrontación y la violencia"; instó a los mexicanos a repudiar las tentaciones "autoritarias y opresoras", ofreció "extirpar el cáncer de la corrupción" y cerró con una consigna: "en México el cambio avanza šy nadie lo detiene!"

La arremetida del mandatario contra el pasado priísta empezó en una gira por Durango: su gobierno, del cambio, "trae el impulso de una sociedad participativa, exigente y llena de energía".

Fue en el parque El Tecuán, en la zona montañosa duranguense, donde retomó el mensaje que desde hace dos semanas viene transmitiendo la Presidencia en todos los medios informativos, principalmente los televisivos. Lo hizo ante cientos de campesinos que asistieron al anuncio y puesta en marcha de "10 mil proyectos de desarrollo forestal" a escala nacional, con una inversión de 2 mil 600 millones de pesos, "cantidad récord, que nunca antes se había invertido en silvicultura".

Nadie detendrá el cambio, abundó, "porque nuestro país decidió transformarse para ser mejor, avanzar y crecer". Instó a continuar impulsando el cambio "juntos, con un verdadero trabajo en equipo, con responsabilidad, porque está en juego el futuro de México, el de nuestros hijos y el bienestar de todas las familias en el país".

Fox fue despedido entre aplausos y gritos de apoyo, destacando la voz de una señora: "Vicente, šcuídate de los Judas!"

Privilegiar el diálogo

De vuelta en la ciudad de México, en Los Pinos, Fox subrayó que su administración ha aprendido la lección del pasado y abrió las puertas a los indígenas. "Hemos rechazado la confrontación y la violencia'' porque el único camino, dijo, es el diálogo.

Agregó: "nunca más un México que diga no a los justos reclamos de sus indígenas'' ni que los excluya o discrimine.

En una reunión con productores indígenas, en la que se mostró satisfecho de los fondos regionales para las etnias que operan por la "transversalidad y la corresponsabilidad'' de diversas secretarías, dijo que cuando el objetivo es desarrollar proyectos productivos y unir esfuerzos en torno a personas que muestran voluntad de superarse, ser mejores y alcanzar más altos niveles de vida, "tenemos la obligación de ponernos a sus órdenes y ayudarlos a cristalizar sus sueños''.

Fue también una ceremonia en la que prácticamente Fox Quesada ratificó la permanencia de Xóchitl Gálvez al frente de la oficina de atención a pueblos indígenas, mientras llega la reforma del Instituto Nacional Indigenista: "Cuenta con todo mi respaldo, con toda la autoridad de la Presidencia de la República para convocar a las secretarías, a las otras dependencias a que se comprometan con ustedes".

Ha llegado la hora, abundó, de operar un cambio de fondo en los patrones del desarrollo del país. Su gobierno, sostuvo, está convencido de que hoy es más necesaria que nunca una transformación cultural que afiance los valores de la diversidad, que termine con la discriminación y que fomente la conciencia de que para progresar "debemos ir juntos".

En la ceremonia, fuera de programa, habló Xóchitl Gálvez, quien para impulsar la idea de que no debe haber discriminación de género en la población indígena, aludió a la filosofía de los rarámuris sobre Dios y el cielo. Y lo haría también el propio mandatario, cuando se despidió de todos con su habitual "que Dios los bendiga''.

Sin embargo, quien traía consigo un discurso mucho más político era el secretario de Agricultura, Javier Usabiaga. Dijo que si la marginación ya no tiene cabida en el México "democrático y moderno", tampoco lo tiene el paternalismo.

En su concepto, la política gubernamental denominada Contigo representa un compromiso de corresponsabilidad con la "mayoría de edad" de la sociedad, porque ésta "ya no quiere que le den, sino que la apoyen para lograr su propio desarrollo y ser el arquitecto de su propio destino".

Por la noche, ante egresados y estudiantes de la Escuela Libre de Derecho, Fox instó a los mexicanos a rechazar el autoritarismo y la manipulación; se comprometió a "extirpar el cáncer de la corrupción" y a restablecer el clima de seguridad.

En la ceremonia del 90 aniversario de la institución académica, celebrada en el Alcázar del Castillo de Chapultepec, añadió: "sin justicia no es posible el estado de derecho", por lo que pidió a todos los sectores políticos y sociales del país mostrar "madurez democrática" para rechazar las tentaciones del autoritarismo y la opresión.

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