Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Jueves 18 de julio de 2002
  Primera y Contraportada
  Editorial
  Opinión
  Correo Ilustrado
  Política
  Economía
  Cultura
  Espectáculos
  CineGuía
  Estados
  Capital
  Mundo
  Sociedad y Justicia
  Deportes
  Lunes en la Ciencia
  Suplementos
  Perfiles
  Fotografía
  Cartones
  Fotos del Día
  Librería   
  La Jornada de Oriente
  La Jornada Morelos
  Correo Electrónico
  Búsquedas
  

Economía

Las plantas La Rosita y Mexicali generarían mil 600 megavatios y trabajarían con gas natural

Empresas de EU construyen dos termoeléctricas en Mexicali; de mil 100 mdd, la inversión total

JORGE ALBERTO CORNEJO CORRESPONSAL

Tijuana, BC, 17 de julio. Empresas estadunidenses construyen en Mexicali dos plantas termoeléctricas cuyo costo será de mil 100 millones de dólares, en coparticipación con inversionistas nacionales.

En el principal proyecto la empresa Intergen construye la planta generadora La Rosita, 12 kilómetros al oeste del núcleo urbano de Mexicali, con inversión de 750 millones de dólares. En la primera fase de operaciones, abril de 2003, La Rosita comenzará a producir 750 megavatios, para en una segunda etapa aumentar la generación a mil megavatios. Trabajará con turbinas alimentadas con gas natural del gasoducto Bajanorte, actualmente en su etapa final de construcción.

De acuerdo con Intergen, la construcción de la planta generará mil empleos, aunque sólo 40 trabajos serán permanentes en la planta. Directivos de la empresa consideran que de la inversión total, 200 millones de dólares representarán una derrama económica para Mexicali, en la fase de construcción. Las calderas operarán con agua reciclada, por lo que la empresa invirtió 20 millones de dólares en infraestructura para tratamiento de aguas negras.

El segundo proyecto, propiedad de Sempra Energy, será la termoeléctrica de Mexicali y requirirá de 350 millones de dólares; estará a 18 kilómetros al oeste de esa ciudad.

La capacidad de producción será de 600 megavatios, con proceso similar al de la planta de Intergen, con dos turbinas de gas. La termoeléctrica de Mexicali quedará lista en julio del próximo año y su construcción requirió la contratación de mil 400 personas, aunque únicamente dará trabajo permanente a 45. Los ejecutivos de Sempra consideran invertir un millón de dólares anuales para la compra de agua a la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Mexicali (CESPM).

Amenaza ambiental: Greenpeace

Por su parte, el grupo ambientalista Greenpeace aseguró en un reporte emitido recientemente en California, Estados Unidos, que el desarrollo de ambas plantas eléctricas y gasoductos en ciudades fronterizas mexicanas del sur de California constituye una amenaza al sistema ecológico de la región. El documento sostiene que la empresa energética Sempra Energy, con oficinas centrales en San Diego, está aprovechando la debilidad de las leyes mexicanas para emprender proyectos quetermoelectrica-12 terminarán por contaminar el aire de las comunidades fronterizas y contribuirán a la devastación de los mantos acuíferos de la zona. El reporte afirma que Sempra Energy utiliza el territorio mexicano para exportar fuentes de energía altamente contaminantes que convertirán a la región fronteriza en una zona de alto riesgo.

Por su parte, el vocero de la empresa energética en California, Michael Clark, aseguró que las declaraciones de Greenpeace son falsas, toda vez que en la proyección se tomaron las medidas necesarias para solucionar los problemas que el grupo apunta en su reporte.

Sin embargo, el congresista del condado de San Diego, Bob Filner, pidió a finales del año pasado al gobierno de Estados Unidos bloquear los proyectos de las dos plantas termoeléctricas que se construirán en Baja California. El congresista señaló en una carta enviada al secretario de Energía de Estados Unidos, Spencer Abraham, que dichas plantas representan una amenaza ecológica para los residentes del sur del California. Filner argumenta que las termoeléctricas expedirán emisiones tóxicas que afectarán el medio ambiente del condado de Imperial, al norte de Mexicali. Por ello, Filner pidió al titular del Departamento de Energía que niegue el permiso a Intergen y Sempra Energy de vender la electricidad de sus plantas de Mexicali. Filner explicó que las termoeléctricas expedirían al ambiente unas 3 mil toneladas de emisiones de óxido y aseguró que las plantas no contarán con un sistema adecuado para controlar emisiones de monóxido de carbono.

Además de la oposición de los ambientalistas y del congresista, los proyectos de las empresas Sempra Energy e Intergen han tenido que sobrepasar la negativa de alcaldes del sur de California y de ejidatarios en el territorio mexicano para llevar a cabo la construcción del gasoducto que las alimentará de gas natural. No obstante, el gasoducto entre Estados Unidos y México construido por Sempra y Pacific Gas and Electric fue aprobado en enero por el gobierno de California.

El proyecto de ambas compañías comprende la construcción de un muelle donde atracarían buques cargueros que traerían consigo barriles de gas líquido. El proyecto contempla que el gas líquido que arribe a la terminal regasificadora de Ensenada sea transformado en gas natural para después ser distribuido a los mercados de Baja California y el Sudoeste de los Estado Unidos a través del gasoducto construido por el consorcio estadounidense. "Este proyecto beneficiará en gran medida a las industrias y a las plantas generadoras de energía que se han asentado en el estado de Baja California al proporcionarles acceso a mayores fuentes de gas natural", comentó Michael Clark, vocero de Sempra. El costo estimado del proyecto es de 500 millones de dólares.

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año