Acusa la presidenta de Eusko Alkartasuna a la
justicia de aliarse con el Estado español
Tienen "trasfondo político" las acciones judiciales
contra Batasuna: Begoña Errazti
El juez Garzón pretende "crispar todavía
más" la frágil situación en el País Vasco,
dice
La monarquía no tiene cabida en el modelo socio-político
por el que luchamos, afirma
ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL
Madrid, 6 de julio. Begoña Errazti, la presidenta
de Eusko Alkartasuna (EA), una de los formaciones políticas más
emblemáticas del País Vasco al representar una ideología
que defiende sin tapujos la autodeterminación y que al mismo tiempo
forma parte del go-bierno autonómico vasco, señaló
hoy que las acciones judiciales contra Batasuna tienen un "trasfondo político"
que lo único que pretenden es "crispar todavía más"
la frágil situación de la región.
La dirigente vasca sostiene que el embargo de todos los
bienes de la coalición abertzale (independentista) y la aprobación
de la nueva ley de partidos políticos son ejemplos fidedignos de
que el "aparato judicial español tiene una dependencia evidente
del Ejecutivo", y de que la estrategia desde el Estado español es
generar más tensión y "crispación" para "justificar
la mano dura contra las vascos".
En
entrevista con La Jornada, Errazti se asume independentista y republicana,
dos ideologías que a su juicio corren el riesgo de ser proscritas
por la derecha española, encabezada por el presidente conservador
José María Aznar, un dirigente político que a su entender
busca llevar el "histórico conflicto vasco" a un "escenario previo
al de la democracia", o sea, a un escenario similar al vivido durante la
pasada dictadura de Francisco Franco.
Antes de manifestar cualquier opinión de carácter
político, Errazti siempre evoca la raíz de su formación,
que, grosso modo, pretende la autodeterminación del País
Vasco, la creación de un modelo sociopolítico de izquierda,
en el que la monarquía no tiene cabida tras la creación de
la república y la soberanía de las instituciones locales.
Otras de las bases ideológicas de EA es que para
llevar a cabo cualquier proyecto político es necesario que éste
se fundamente en la "paz", por eso una de sus principales reivindicaciones
es que "ETA no nos representa ni tiene ningún derecho para representar
al pueblo vasco, puesto que la violencia sólo nos lleva a un callejón
sin salida", y "además el pueblo vasco no se identifica con los
asesinatos, los secuestros y las amenazas".
Encuentro sin exclusiones
Errazti sostiene que el histórico conflicto vasco
tiene "salidas", pero que para ello es necesario desarrollar un proceso
de negociación que al menos permita identificar los "puntos de encuentro"
entre la "inmensa diversidad de la sociedad vasca", por lo que "nadie"
puede ser excluido, "por lo que es necesario que tanto el Partido Popular
(PP), el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Batasuna y nosotros
nos sentemos a dialogar sin imposiciones previas y con vocación
de buscar soluciones".
Por eso considera que las decisiones del juez Baltasar
Garzón, de la Audiencia Na-cional, lo único que pretenden
es "provocar más crispación y sufrimiento para, en de-terminado
momento, justificar la mano dura en Euskadi, pues yo he escuchado a dirigentes
del Partido Popular que esto (la situación política en Euskadi)
se resuelve con mano dura y ya está".
La dirigente sostuvo que el auto de Garzón para
embargar todos los bienes de Batasuna es "ilegal" y "anticonstitucional",
un escenario que según su punto de vista no es nuevo en las acciones
judiciales del magistrado español, ya que ha ordenado incluso la
ilegalización de asociaciones civiles vascas responsables de la
difusión del euskera, el idioma oficial en el Estado español
desde hace sólo 20 años y que, de acuerdo con la dirigente
vasca, sigue su-friendo el acoso permanente del "centralismo" español.
Errazti, que a raíz de las elecciones del 13 de
mayo del 2001 se erigió como una de las voces más emblemáticas
del nacionalismo vasco, también se refirió a la situación
creada una vez aprobada la nueva ley de partidos políticos, creada
ad hoc por el PP y el PSOE para ilegalizar a Batasuna, al sostener
que esta medida lo "único que pretende es ilegalizar las ideas"
y, según su punto de vista, se enmarca en una "estrategia del Estado
español para criminalizar al nacionalismo vasco en general", ya
que ?afirma? "desde que el PP tiene mayoría absoluta en el Congreso
ésta sólo se ha utilizado para atacar las regiones y en concreto
al nacionalismo y al separatismo vasco".
La dirigente de EA apeló a la responsabilidad de
los dirigentes políticos, sean vascos o españoles, para ver
"con objetividad" las situaciones "lamentables" que se cometen día
a día en la región.
Entre ellas citó las torturas sistemáticas
que, según denuncias de organizaciones internacionales, sufren militantes
o presuntos miembros de ETA y, por supuesto, la amenaza continua con la
que viven los concejales y representantes políticos del PP y el
PSOE, amenazados por ETA de "forma constante".