Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Jueves 20 de junio de 2002
  Primera y Contraportada
  Editorial
  Opinión
  Correo Ilustrado
  Política
  Economía
  Cultura
  Espectáculos
  Estados
  Capital
  Mundo
  Sociedad y Justicia
  Deportes
  Lunes en la Ciencia
  Suplementos
  Perfiles
  Fotografía
  Cartones
  La Jornada de Oriente
  Fotos del Día
  Librería de La Jornada
  Correo Electrónico
  Busquedas
  >

Política
Mintió la mayoría de quienes aseguraron tener pruebas de un complot, expresan

Vigente, la tesis de confusión en el homicidio de Posadas Ocampo, dicen 5 ex procuradores

Frustrante, que pesen más los dichos de asesinos que el trabajo de funcionarios, aseveran

GUSTAVO CASTILLO GARCIA

En la investigación del asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, reabierta por la Procuraduría General de la República (PGR) en secreto desde el 12 de junio de 2001, "es frustrante que pesen más los dichos de delincuentes y asesinos que el trabajo responsable y profesional de cientos de servidores públicos", dijeron los ex titulares de la dependencia Jorge Carpizo, Antonio Lozano Gracia, Humberto Benítez Treviño, Diego Valadés y Jorge Madrazo.

En un comunicado de prensa, los cinco ex procuradores, en su momento responsables de las investigaciones del asesinato del prelado, expresan: "debido a la cantidad de rumores, especulaciones y de supuestas nuevas líneas de investigación, el gobierno mexicano decidió, en 1995, investigar ocho hipótesis partiendo de cero, y sólo una se confirmó, la de la confusión, y así se volvió a probar que la PGR estaba, desde 1993, en lo correcto".

Manifestaron que desde mayo de 1993 hasta noviembre de 2000 se desahogaron unas 500 declaraciones ministeriales, "múltiples estudios periciales de la más diversa índole, muchos de ellos de una calidad reconocida a nivel mundial, y siempre se concluyó que el cardenal de Guadalajara había muerto como resultado de una confusión durante un enfrentamiento entre dos organizaciones criminales de narcotraficantes".

"Un éxito de la procuración de justicia"

Desde agosto de 1998, señala el comunicado, a partir de supuestas "pruebas contundentes" que presentarían quienes "sostienen que la muerte ocurrió por un complot", se decidió integrar a la tercera investigación del caso Posadas a la Conferencia del Episcopado Mexicano.

Aseguran los ex procuradores que "la mayoría" de los supuestos testigos que tenían "pruebas contundentes" del complot "mintió en sus declaraciones, muchos de ellos reprobaron la prueba del polígrafo y en otros el trastorno mental fue detectado por peritos diversos".

Abundan: "debe precisarse que a partir de 1998, durante la existencia del Grupo Interinstitucional, los exámenes a los testigos fueron realizados conjuntamente por peritos de la PGR y del gobierno de Jalisco. Otros testigos, según se acredita en la averiguación previa, recibieron dinero, bienes y prebendas para declarar sobre un supuesto complot del que no existen datos ciertos que puedan significar una línea de investigación seria. Jamás se pudo avanzar con sus dichos, porque éstos se caían por su propio peso".

Los ex procuradores indican que "en las diversas etapas en que fuimos responsables de la investigación, ésta se llevó apegada a derecho, y de cara a la sociedad. Se hizo un esfuerzo que constituye un éxito de la procuración de justicia en México porque, desde una semana después del asesinato, ya se conocía la verdad, misma que se ha comprobado en las otras dos investigaciones que se han realizado. Cada uno de nosotros responde a las actuaciones realizadas en su respectivo periodo".

Para concluir, exigen que "para alcanzar la credibilidad de la sociedad", las conclusiones de las actuales investigaciones y sus determinaciones estén "basadas únicamente en elementos probatorios ciertos, con la finalidad de que México continúe siendo un país de leyes".

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año