Labores normales en oficinas tributarias: subtesorero

Aumentó la recaudación de impuestos 10% el martes, pese al paro sindical

ANGEL BOLAÑOS SANCHEZ

Contra lo previsto, a pesar del paro convocado por el Sindicato Unico de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (SUTGDF), el martes pasado se registró un incremento en la recaudación fiscal de más de 10 por ciento, al ingresar a las cajas alrededor de 40 millones de pesos, lo que demuestra que las administraciones tributarias funcionaron con normalidad.

Ayer, en el segundo día de la llamada asamblea informativa, sólo cien trabajadores se desplazaron hacia las oficinas centrales de la Secretaría de Finanzas, en cuyo edificio se ubica el local sindical, y permanecieron en el lugar hasta después de las 14 horas, aun cuando la dirigencia del SUTGDF dio por terminado el paro desde las 9 de la mañana.

El subtesorero de Administración Tributaria, Jesús Martín del Campo, informó que el martes sólo 10 por ciento de los trabajadores no se presentaron a laborar, mientras que ayer la asistencia fue de casi ciento por ciento.

El funcionario explicó que la mayoría de los empleados que no laboraron el martes es personal que se encuentra en situación "deambulatoria", es decir, se quedaron sin materia de trabajo; por ejemplo, los que antes se ocupaban de la lectura de los medidores de agua, actividad que no se realiza ahora, pero que se niegan a ser adscritos a otra área.

Observó que el lunes, un día antes del paro, muchos contribuyentes tomaron sus previsiones y acudieron a las oficinas de la Tesorería a realizar sus pagos, por lo que la recaudación tuvo un incremento de 10 por ciento respecto a la semana anterior, con un ingreso de alrededor de 38 millones de pesos. Pero contra lo esperado ante el anuncio del paro, el día siguiente los ciudadanos acudieron a pagar, con lo que la recaudación aumentó en poco más de 10 por ciento.

Ayer ya no aparecieron las mantas contra la "política de austeridad republicana" del jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, y los trabajadores negaron que su movimiento sea solamente por la entrega de uniformes; "lo único que estamos solicitando es que se cumplan las condiciones generales de trabajo", dijeron. Aseguraron que incluso el diputado federal del PRD Alfredo Hernández Raigosa les dijo que tenían razón al exigir el cobro de los bonos de productividad.

Del Campo refirió que la principal exigencia de los trabajadores es el pago de lo que llamó "bono Espinosa Villarreal", que les concedió el ex regente un mes antes de la elección de 1997.

El funcionario explicó que durante la mañana del martes se detectaron presiones de algunos delegados sindicales para impedir que los trabajadores entraran a trabajar, como ocurrió en la administración tributaria que se ubica en Izazaga 89, donde el delegado Luis Calzada Rodríguez, a la hora de ingreso trató de impedir que los empleados checaran su entrada y les aseguraba que no se les descontaría el día por no trabajar, pero él mismo ya había tramitado el día de descanso dos semanas antes.