CIUDAD PERDIDA

Miguel Angel Velázquez

Los impolutos andan sueltos

PERO QUE barbaridad.

UNA PORCION de la llamada sociedad civil -los que se proclaman sin olor, color ni sabor- buscó desesperada entre la chatarra del salinismo quién pudiera ejercer, ahora desde la visión foxista, la presión continua sobre el Gobierno del Distrito Federal.

Y ENTONCES hallaron que Luis de la Barreda cumplía el perfil justo para encabezar la cruzada de los impolutos (será porque sus méritos, la evasión de impuestos de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal- da ejemplo de ello) lo colocan como el mejor representante de ese grupo donde se halla, entre otros, la Coparmex.

PERO NO es todo, hoy descubrimos que el hombre justo, el mero presidente del Instituto Ciudadano de Estudios sobre la Inseguridad, Luis de la Barreda, tiene, lea usted bien, una denuncia en su contra por el delito de abuso de autoridad.

EL 9 de mayo pasado la Procuraduría General de Justicia del DF recibió la denuncia de Fernando Bernal García, quien debido a una recomendación de De la Barreda fue privado de su libertad en el reclusorio sur por el delito de tortura.

EL JUICIO en contra de Bernal, quien fungía como agente de la Policía Judicial, continuó hasta que, sin pruebas en su contra, fue absuelto y entonces inició la contrademanda, situación que lo hizo entender que la injusticia es pareja.

LA DENUNCIA, igual que le sucede a muchísimos ciudadanos de la capital, "incurrió en dilación", según las palabras de Bernal, quien intentaba que se enviara una recomendación en contra del agente del MP que lo había llevado a la cárcel y, frente a ese inconveniente, buscó la ayuda de la Comisión de Derechos Humanos del DF, la misma que se hizo eco de la denuncia falsa de tortura en su contra.

ALLI, SIEMPRE según Bernal, el visitador Arturo Gálvez Mújica aseguró que la queja presentada por el ex agente judicial no iba a tener seguimiento.

LA EXPLICACION del funcionario de la CDHDF fue que no se le daría seguimiento a la queja "porque al hablar con sus superiores le ordenaron no admitirla, pues según el ahora probable responsable, Luis de la Barreda, se iba a poner en duda su autoridad moral, en virtud de que se contraponía a la recomendación" que había emitido la propia CDHDF, de la que De la Barreda era presidente.

Y ES este señor, el que no pagó impuestos, el que según la denuncia de Fernando Bernal prefirió salvar su "autoridad moral" antes que realizar un acto de justicia, quien hoy se erige como presidente de un organismo del que se ufanan Fox y su secretario de Gobernación, Santiago Creel.

A NADIE sorprenden las pifias del gobierno federal. Total, otra mancha al tigre ni quien la note, podrán decir los funcionarios del gobierno foxista, pero la ciudadanía tiene el derecho de saber para creer y dar dimensión a las palabras de Luis de la Barreda, que, si ha sido capaz de hacer lo que arriba se describe en la presidencia de la comisión que le regaló Salinas, hoy, en el puesto que le obsequió Fox, puede decir lo que se le dé la gana.

šVIVA LA democracia!

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