Advierte López Obrador que no aceptará chantajes; intereses políticos quieren generarnos problemas, dice

Rompe pláticas el SUTGDF y para labores

Garantizará el gobierno con empleados de confianza la prestación de servicios: Encinas

BERTHA TERESA RAMIREZ

Los trabajadores sindicalizados del Gobierno del Distrito Federal se declararon en "asamblea informativa", por lo que este martes dejará de laborar alrededor de 90 por ciento de la plantilla de empleados. Los servicios que se verán afectados son los de limpia y trámites administrativos en las 16 delegaciones políticas, principalmente, señaló la dirigencia sindical.

El gobierno de la ciudad asumirá su responsabilidad y garantizará, con los 60 mil empleados de confianza, la prestación de todos los servicios, aseguró el subsecretario de Gobierno, Alejandro Encinas Rodríguez.

No obstante, hizo un llamado a la ciudadanía para mantenerse atenta a las informaciones del GDF, pues de cualquier forma se entrará en un proceso irregular debido al paro que realizará el gremio laboral afiliado el SUTGDF.

Habrá continuidad de servicios

El funcionario llamó a la comunidad a no tirar basura y disminuir la generación de residuos, debido a que el personal de limpia es principalmente el que dejará de laborar. En cuanto a los servicios administrativos, dijo que la ciudadanía podrá realizar pagos de estos servicios en las 39 oficinas recaudadoras del DF, las cuales operarán con personal de estructura sin ningún problema, así como en las mil 600 sucursales bancarias de los 16 bancos en la zona metropolitana, que cuentan con formatos que permiten el pago de 80 conceptos de contribuciones, que van desde pagos de licencia, cambio de propietario, predial vigente y vencido, 2 por ciento de nómina vencido, tenencia local y federal vencidas.

La dirigencia sindical determino anoche llevar a cabo hoy una "asamblea informativa", luego de sostener reuniones con funcionarios de la secretarías de Finanzas y Salud, así como de la Dirección General de Política Laboral, durante las cuales exigieron el Gobierno del Distrito Federal el pago de 15 por ciento de las multas locales y federales de derechos y contribuciones, así como la entrega de vestuario y la reinstalación de tres trabajadores a los que se les sigue un proceso laboral administrativo, debido a que sin justificación no se han presentado a trabajar o han obstaculizado la prestación de los servicios de salud.

Paro sin justificación

Durante una conferencia de prensa que ofreció Alejandro Encinas, éste dijo que la dirigencia sindical no mostró disposición para llegar a un acuerdo frente al emplazamiento de paro de labores por 72 horas "por causas que a nuestro juicio no ameritan un paro, ni son de carácter general ni deben poner en riesgo la prestación de los servicios en la ciudad."

Indicó que de los 16 planteamientos que conforman el pliego petitorio, en 12 ya existen acuerdos. Al respecto, Oscar Rosado, tesorero de la capital, señaló que la dependencia heredó del pasado una serie de convenios, acuerdos y minutas que no están dentro de las Condiciones Generales de Trabajo que tiene firmadas el gobierno con el SUTGDF.

Uno de esos acuerdos se remonta a junio de 1997 cuando, a un mes de las elecciones federales y de los comicios en los que por primera vez se elegiría jefe de Gobierno de la ciudad, se implantó únicamente en la Secretaría de Finanzas, de manera ilegal, un bono de productividad a todo el personal por orden del entonces regente Oscar Espinosa Villarreal "únicamente para los trabajadores de finanzas".

Indicó que otra de las peticiones que ha hecho la dirigencia sindical es la retribución de lo que el sindicato llama "derrama de cajeros", que consiste en otorgar a los trabajadores los sobrantes o excedentes, producto de lo que quedaba por no dar el cambio. Indicó que otra de las demandas es que se les cubra el doble pago de aguinaldo a los trabajadores de la subsecretaría de Catastro por realizar trabajo de campo, lo cual es ilegal.

El gobierno actuará en el marco de la legalidad, señala el Ejecutivo

No se regresará a la entrega de prebendas a la dirigencia sindical, dice

BERTHA TERESA RAMIREZ

Andrés Manuel López Obrador, jefe de gobierno capitalino, señaló que no se permitirá ningún tipo de chantaje en lo que se refiere al movimiento laboral iniciado por el Sindicato Unico de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal. Afirmó que la administración de la ciudad ha actuado con respeto a los derechos de los trabajadores, por lo que no se entiende este movimiento en el que, "desde luego, puede haber intereses políticos que quieren generarnos problemas".

Agregó que el gobierno local actuará en el marco de la legalidad y en todo aquello que signifique garantizar mejores condiciones para los trabajadores no va a regatear y se van a garantizar, como hasta ahora, todos los derechos. Empero, advirtió: "no vamos a aceptar presiones para otorgar prebendas a dirigentes".

Abundó el mandatario local que por convicción no se violan las Condiciones Generales de Trabajo; sin embargo, "de repente surge este movimiento".

Ustedes pueden constatar, dijo a los reporteros, que aun cuando ninguna empresa y ninguna instancia del gobierno local o federal ha otorgado incrementos salariales de 8 por ciento, el gobierno capitalino ha cumplido su compromiso de campaña de entregar incrementos salariales de cuando menos dos puntos por arriba de la inflación.

Indicó que no sólo se ha cumplido con esa meta, sino que el año pasado se entregaron cuatro puntos por encima del índice inflacionario y este año casi tres puntos por encima del mismo.

Al referirse a la demanda de vestuario, una de las peticiones del actual movimiento laboral, dijo que la costumbre anterior era que el sindicato intervenía para comprar la ropa y el calzado y se encargaba también de distribuir estos bienes; sin embargo, se demostró que éstos no llegaban a los trabajadores y entonces lo que se ha venido haciendo es entregar esa prestación de manera directa y sin intermediarios para que no haya ningún negocio ilícito, pues este gobierno no va a tolerar la corrupción.

"Nosotros no somos cómplices de corruptos; haría yo muy mal que para evitar cualquier movimiento tuviese que coptar o comprar a los dirigentes con prebendas."

Interrogado respecto a si el movimiento laboral obedece a un boicot a su gobierno orquestado por un sindicato de filiación priísta, señaló: "vamos a ver, todo se sabe, además, si ustedes están acompañando el proceso y el trabajo de ustedes es informar, si hay una actitud irracional meramente política o partidista, se va a saber. No se puede ocultar nada de eso, ya no es el tiempo de antes".

Por eso dijo que ya había hablado de que ya pasó la época de los líderes charros, el tiempo en que los líderes vivían en las Lomas y andaban en carros último modelo y el gobierno les tenía que cumplir todos esos privilegios para mantener el control y manipular a los trabajadores.