Se afecta a grupos estadunidenses, dicen funcionarios

Presiona EU para que se permita la pesca marina en islas Revillagigedo

La disminución de los bancos de especies marinas -en especial delfines, tiburones y mantarrayas gigantes- en aguas de las islas Revillagigedo, por la excesiva captura de ejemplares por parte de grupos de estadunidenses que practican la pesca deportiva, obligó a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) a prohibir que dicha práctica continuara efectuándose en esa zona marítima mexicana.

La medida, puesta en práctica desde febrero de este año, ha afectado intereses particulares de empresas de yates de San Diego, California, que ofrecían tours para la práctica de esa actividad, mediante el cobro de 5 mil dólares por grupos de 10 o 12 personas. Debido a ello, el gobierno de Estados Unidos y su embajada en México "han venido ejerciendo una sigilosa presión ante las autoridades mexicanas para que reabramos la zona nuevamente a la práctica de la pesca marina", dijeron ayer Diana Ponce Nava y Antonio Fuentes Montalvo, subprocuradora de recursos naturales y director de políticas de verificación y de pesca y recursos marinos, respectivamente.

"La ley no se negocia, se respeta", dijo Ponce Nava, al afirmar que México no reabrirá la región marina de las islas Revillagigedo al deporte de la pesca marina, pues se ha comprobado que las especies mencionadas han descendido en volumen y desarrollo. Comentó que en Hawai, Estados Unidos puso en vigor una veda similar, con el mismo propósito; entonces "Ƒcómo quiere que nosotros volvamos a permitir esa práctica que amenaza la extinción de la fauna en nuestras aguas?", se preguntó.

Lo anterior fue mencionado en la conferencia de prensa en la que la Profepa dio a conocer un informe de resultados sobre pesca y recursos marinos durante 2001 y enero-abril de 2002.