Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Viernes 12 de abril de 2002
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Preocupante, el número de deportaciones ordenadas por Irán, dice Lavanchy

Presupuesto de 10 mdd para el programa de repatriación de afganos este año: ACNUR

JUAN PABLO DUCH/II Y ULTIMA ENVIADO

Teheran, 11 de abril. Para el primer grupo de refugiados afganos que quiere regresar de inmediato, se elaboró un programa de repatriación con un presupuesto de 10 millones de dólares para este año, señala el jefe de la misión en Irán del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el brasileño Philippe Lavanchy, en entrevista con La Jornada.

-¿Cuál es el mecanismo de repatriación?

tm04-044511-pih-El acuerdo tripartita (ACNUR-Irán-Afganistán) que se firmó la semana pasada en Ginebra define cómo se va a hacer la repatriación, y es importante porque se reitera el criterio de repatriación voluntaria. Se menciona también que pueden beneficiarse del proyecto todos los afganos, no solamente los que han sido registrados por las autoridades iraníes. Hace año y medio los iraníes tomaron la iniciativa de registrar a todos los extranjeros y yo diría que 85 por ciento de los afganos fueron anotados en la oficina de migración del Ministerio del Interior iraní (BAFIA, por sus siglas en inglés). Los iraníes compartieron con ACNUR toda esa información y ahora tenemos un banco de datos computarizado sobre todas las personas. Esto es muy importante, ya que nos permite identificar un grupo que está interesado en regresar de inmediato y de manera voluntaria.

-Identificada la persona que desea retornar, ¿qué etapas tiene que pasar para beneficiarse del programa de repatriación?

-Para facilitar el regreso voluntario empezamos a crear nuevos centros de registro en el país, donde hay representación de BAFIA y también de ACNUR. Los iraníes están volviendo a registrar a las personas y les dan un documento que les permite llegar hasta la frontera, mientras ACNUR verifica el aspecto voluntario de la repatriación. Los entrevistamos y nos cercioramos de que realmente no están siendo forzados a regresar. Les entregamos un documento, que es su primera identificación en Afganistán, y les sirve para recibir ayuda al llegar a su país.

La estrecha cooperación con las autoridades iraníes -dice Lavanchy- permite a ACNUR tener una idea precisa de las medidas a tomar. Por ejemplo, de acuerdo con los datos que proporcionó el gobierno de Irán, se sabe que más o menos 52 por ciento de todos los afganos que hay aquí provienen de la región de Herat y aldeas vecinas. De ahí que el mayor flujo de repatriados podría darse en el norte de Irán, sobre todo en el puesto fronterizo de Dogharoun, y posiblemente menos en el puesto de Milak, en el sur.

Los centros de repatriación se ocupan no sólo de los aspectos administrativo y legal, sino que también disponen de mantas y una unidad que permite prestar asistencia médica a los refugiados, distribuyen alimentos y cuentan con autobuses para transportar a los repatriados, así como con camiones para transportar sus menajes sin limitación.

"No hay límites para transportar los bienes porque queremos que la repatriación sea el comienzo de la reconstrucción de Afganistán", explica Lavanchy.

Y añade: "En este sentido también negociamos con el gobierno de Irán la posibilidad de transferir dinero de aquí para allá, y eso es muy positivo ya que el gobierno aceptó hacer una excepción de las reglas para los refugiados; o sea, están autorizados a transferir la cantidad que quieran en moneda iraní o afgana y también mil dólares o el equivalente en otra divisa. Casi todos tienen rials (la moneda iraní), para ellos es perfecto porque no tienen ni que cambiar el dinero. Y eso también es una manera de invertir y facilitar el desarrollo de actividades que generan ingresos. Es un punto muy importante.

-Aunque no muchos, se sabe que de un tiempo para acá ha habido casos de refugiados afganos que optaron por regresar por su cuenta y riesgo. ¿Se mantendrá esta tendencia, digamos de modo paralelo al programa de repatriación?

-Los regresos espontáneos, a mi juicio, van a disminuir. Las personas van a utilizar nuestro mecanismo en la medida que el acuerdo con Irán y Afganistán permite a todos los afganos, no sólo a los registrados, beneficiarse del programa. Por varias razones se decidió dar la ayuda a los refugiados una vez que estén dentro de Afganistán. De ese modo se evita lo que llamamos the revolving door, la puerta de reingreso; además, si se da la ayuda acá, muchos quizá no viajarían. Nuestra meta es facilitar la instalación de la persona en el sitio de destino y por eso no entregamos sólo mantas y alimentos, sino herramientas y todo lo que necesiten para poder trabajar.

-Si alguien decide quedarse, ¿corre el riesgo de ser deportado por las autoridades de Irán?

-Lo que está pasando, y es una cosa importante que estoy negociando con las autoridades, es que hay deportaciones en números preocupantes. Es una situación compleja. El gobierno iraní argumenta que se trata de personas que ingresan ilegalmente al país y son regresadas porque ahora quieren mantener con Afganistán relaciones normales de Estado que presuponen entrar con pasaporte, visa, etcétera. En esto tienen razón, pero ACNUR ha detectado que no siempre son casos de ese tipo y también se expulsa a afganos que no quieren volver a su país.

Lavanchy añade: "También es cierto que la gran mayoría de los deportados no son refugiados, sino migrantes económicos. Hay que diferenciar claramente estos dos conceptos. El refugiado es perseguido y no tiene más la protección de su país de origen. Y el migrante económico busca una mejor situación material, pero todavía tiene la protección. Es una cosa muy diferente, pero ACNUR tiene la obligación de verificar que no se deporte a ningún refugiado".

-En caso de que no logre consolidarse el gobierno interino afgano de Hamid Karzai y se desate una nueva guerra civil como la que ya ocurrió en los años 90, ¿estaríamos ante un círculo vicioso y la necesidad de recibir una nueva oleada de refugiados?

-A mi juicio, por ahora, y los refugiados tienen una información mucho más detallada que la nuestra a través de la familia en Afganistán, si regresan es porque saben que pueden hacerlo.

-Hay preocupación por las condiciones en que regresan los repatriados: falta de alimentos, de facilidades de vivienda y de asistencia médica adecuada, por mencionar tres de las carencias mayores. Un vocero de la ONG Médicos sin Fronteras calificó de "prematuro" el programa de repatriación.

-Hay ciertas condiciones para la repatriación, yo no voy a decir que son las ideales, pero lo importante no es eso, sino la decisión del individuo de considerar si quiere regresar o no. Y nosotros tenemos que ver de qué manera podemos facilitar ese retorno. Esa iniciativa del refugiado, el derecho de cada individuo de regresar importa más que las condiciones en que se dé el retorno a su país de origen. Este es el punto esencial.

Philippe Lavanchy, artífice del acuerdo firmado en Ginebra, al concluir la plática con La Jornada, se muestra optimista. En todo caso está fuera de duda que ha puesto lo mejor de su empeño y capacidad profesional para mejorar la situación de los refugiados afganos, un drama que afecta a casi 5 millones de personas, sumando las que están en Irán y en Pakistán, pero también en atender las necesidades de los cerca de 250 mil refugiados iraquíes que acoge Irán.

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