Autora de una biografía novelada sobre la poeta y feminista desaparecida en 1981

Gilda Salinas ensambla testimonios para reconstruir el mito de Alaíde Foppa

''Un sentimiento de culpa por el asesinato de su hijo Juan Pablo la indujo al sacrificio''

Elena Poniatowska y Sabina Berman participan en la presentación del libro en Casa Lamm

RENATO RAVELO

Era tal el magnetismo amoroso de la personalidad de Alaíde Foppa, que cuando desapareció en 1981 nadie la quiso dar por muerta, como en un secreto pacto con la esperanza de que reapareciera. Y es dos décadas después que alguien ajena puede escribir su biografía en forma de novela: Alaíde Foppa. El eco de tu nombre, cuya autora es Gilda Salinas.

Todo era resistencia al recuerdo, apuesta por el dato fragmentario, abrazo a la imagen añorada, como reconoce Sara Sefchovich en el prólogo. Gilda Salinas (México, 1949), había guardado desde 1981 esa rabia cuando se supo de la desaparición de Foppa, pues la conocía por referencias y por sus aportes a las libertades de las mujeres. Se hallaba en la entrada a la edad adulta, con abrazo a la vocación de escritora.

Justamente por ello, en 2000, en su calidad de organizadora de una bienal de dramaturgia, Gilda Salinas llegó a la embajada de Guatemala a formular una invitación, para ser atendida por Laura Solórzano Foppa. La agregada cultural no estaba, pero la sola pronunciación del apellido fue como despertar de un encanto o, más bien, comenzarlo.

Durante la bienal buscó a Laura y le solicitó una entrevista. Ella ya había decidido que tendría que acercarse a la vida de Alaíde de la manera novelada. A su vez la hija de la poeta y feminista le sugirió otros tantos nombres (Sefchovich entre ellos, aunque reconoce que se negó porque dolía el recuerdo), y con tiento fue descifrando etapas de la vida.

Doloroso recuerdo

Tres son los ejes que seguí, señala la también autora de un libro sobre Nellie Campobello y otro acerca de Manuela Sáenz: ''Por una parte su vida como luchadora, qué eventos la llevan a ese cambio que la hace ser radical. El otro es lo relativo a su relación e influencia en el feminismo de la época y la tercera vertiente es todo lo que nos enseñó con su lucha por la justicia en Guatemala y otros países".

A esa faceta de la luchadora social, sin embargo, le hacía falta esa otra cara humana y literaria, la que hizo a Foppa escribir sobre el sexo: ''Oculta rosa palpitante/ en el oscuro surco,/ pozo de estremecida alegría/ que incendia en un instante/ el turbio curso de mi vida,/ secreto siempre inviolado, fecunda herida".

Desde que Gilda Salinas conoció a Laura emprendió la solicitud de 35 entrevistas para completar su expediente informativo: ''Siempre había una resistencia. Dos de las mujeres que vi me dieron pistas sobre esto hace poco. Por una parte había como una esperanza de que reapareciera; por la otra, Alaíde era un mujer a la que todo el mundo que conocía la amaba, por lo que el recuerdo era doloroso".

La propia Laura, completa Salinas, ''me confesó al final que cuando me le acerqué por primera vez había una gran molestia conmigo. Sin embargo, ahora, luego de que pudo leer cómo quedaron los testimonios, me dijo que finalmente lloró".

Lo que hace Gilda Salinas es un trabajo casi artesanal, un ensamblado de testimonios, un juego de tiempos mientras se teje una trama, pero también plantea una hipótesis, punto necesario para lograr la tensión dramática que requiere la novela.

La narradora propone que un sentimiento de culpa hace que Alaíde decida pagar con su vida la muerte de su hijo menor, Juan Pablo, quien había sido asesinado por el régimen de Romeo Lucas García. Así, en el momento que es interceptada en una carretera en Guatemala, está lista para el sacrificio.

Contra el olvido

La investigación de la escritora incluyó, además de las entrevistas, visitas a la hemeroteca y biblioteca de Guatemala en varias ocasiones. El hecho de no estar ligada personalmente permitió que se moviera como en la reconstrucción de un mito. Su trabajo era darle credibilidad.

Fue tal el respeto que requirió el personaje que una vez seleccionados los fragmentos de testimonios que se incluirían textualmente, Gilda Salinas se los dio a leer a Laura para que aprobara su publicación: ''Ya el libro con la parte literaria no se lo di a leer, porque entonces no habría sorpresa al leerlo".

La autora se reconoce en los personajes femeninos que ha investigado:

''Creo que esas grandes figuras y ejemplos se están empolvando para las nuevas generaciones, por lo que es necesario darlos a conocer."

(El libro Alaíde Foppa. El eco de tu nombre, coedición de Raya en el Agua y Grijalbo, lo presentan hoy Elena Poniatowska y Rafael Ramírez Heredia, con Sabina Berman como moderadora, en la Casa Lamm, a las 19:30 horas. La animación musical estará a cargo de Danny Rojo, Michelle Batres, Marco Anthonio, Cinthia y Gabriel Esle, con lectura de poemas de Eloísa Gottdiener.)