México no permanecerá indiferente ante violaciones

Conciliar derechos humanos y agenda política: Castañeda

No permitiremos que se desvirtúe el asilo político, afirma

AFP Y DE LA REDACCION

Ginebra, 26 de marzo. El canciller Jorge G. Castañeda declaró hoy, durante la 58 sesión anual de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, que México no permanecerá "indiferente" frente a las violaciones de las garantías individuales en otros países del mundo, y afirmó que "la política exterior del presidente Fox no omite escuchar las expresiones de grupos que promueven los derechos humanos y la democracia en naciones donde su observancia es precaria".

Subrayó que la actuación de México "en los foros multilaterales y en nuestras relaciones con otros estados es congruente con las normas que hemos defendido en materia de derechos humanos", y descartó que se base en "consideraciones políticas".

En medio de las acusaciones que le han hecho dos medios impresos cubanos ?que lo calificaron de "diabólico y cínico"? y del gobierno de La Habana, que lo responsabilizó del retiro del presidente Fidel Castro de la reunión cumbre realizada en Monterrey, Castañeda afirmó que el gobierno mexicano no permitirá que se pretenda manipular o desvirtuar la "larga y distinguida tradición de asilo político".

"Nuestra posición sobre la situación de los derechos humanos en otros países no se basa en consideraciones políticas ?argumentó?. No está determinada por cálculos de coyuntura ni es selectiva. Por el contrario, parte del reconocimiento de que los derechos humanos constituyen valores absolutos y universales, y de que es obligación de los estados, tanto individual como colectivamente, velar por su respeto.

"Pero también confirma que es posible conciliar la promoción activa de los derechos humanos con agendas políticas constructivas y agendas exitosas de cooperación e intercambio económicos. Por ello seguiremos manteniendo una actitud a la vez vigilante y constructiva para contribuir a su respeto."

Con giros literarios en su extenso discurso, Castañeda parafraseó al escritor colombiano Gabriel García Márquez para afirmar que el ámbito internacional que vivimos es un sistema "en tiempos de cólera", que requiere "de una evaluación mesurada de las implicaciones que conllevan nuestros esfuerzos para derrotar al terrorismo internacional".

En explícita referencia a los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, Castañeda subrayó que la comunidad internacional no debe apartarse de las normas fundamentales para los derechos humanos para combatir el terrorismo y mantener condiciones para preservar la seguridad humana. "Estamos frente a una doble paradoja", sintetizó el canciller mexicano.

"Superamos abusos del pasado"; denuncian caso Bárbara Zamora

En su discurso, Castañeda hizo un amplio reconocimiento a la labor de la alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Mary Robinson, quien recientemente presentó su renuncia por estar en desacuerdo con presiones que ha recibido para obstaculizar su labor. Destacó que la nueva política del Estado mexicano en materia de derechos humanos tiene "tres aristas": la soberanía no debe usarse como "escudo contra la mirada externa"; también los países desarrollados deben exponerse a la crítica exterior, porque "han sido claramente beneficiados por ella". Y citó los casos de Estados Unidos y la segregación racial, y los procesos de descolonización de Francia y Gran Bretaña.

De acuerdo con el canciller, la necesidad de superar los abusos del pasado y construir nuevos acuerdos sociales y políticos en México se ha traducido en importantes decisiones, como la liberación, "por la decisión del Presidente", de los ecologistas Teodoro Cabrera y Rodolfo Montiel; de los pescadores michoacanos Leocadio Ascencio y Aurelio Guzmán, del general José Francisco Gallardo y "cerca de un centenar de prisioneros detenidos durante el conflicto en Chiapas".

Citó el "doloroso caso de la muerte violenta de la abogada Digna Ochoa", y subrayó que "nuestro único interés es que se concluya una investigación transparente y creíble, con total independencia de los resultados que ésta arroje".

Por otro lado, el Observatorio para la Protección de los Defensores de los Derechos Humanos manifestó hoy, por conducto de un comunicado, su preocupación por la integridad física y psicológica de la licenciada Bárbara Zamora, quien denunció haber recibido amenazas similares a las que precedieron al asesinato de su compañera Digna Ochoa.

El Observatorio, un programa que forma parte de la Federación Internacional de Derechos Humanos y de la Organización Mundial Contra la Tortura, solicitó al gobierno mexicano que adopte medidas para la protección física y psicológica de Bárbara Zamora, que ordene una investigación "inmediata, exhaustiva e imparcial" para identificar a los responsables de las amenazas" y que se asegure la aplicación de lo dispuesto por la Declaración sobre los Defensores de los Derechos Humanos, adoptada por la ONU en diciembre de 1998.