Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Miércoles 27 de febrero de 2002
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Política
PAGINA 9

Lourdes Galaz

Los camaradas le rinden homenaje en San Lázaro

Primer coordinador de la izquierda parlamentaria

Más allá del ejercicio de la crítica y de la confrontación

Va por Martínez Verdugo

En el esfuerzo de unidad más importante de la izquierda mexicana surgió en 1979 la Coalición de Izquierda, integrada por el Partido Comunista Mexicano, el Partido del Pueblo Mexicano, el Partido Socialista Revolucionario y el Movimiento de Acción y Unidad Socialista. En ese mismo año la izquierda participó en el proceso electoral para renovar la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. La Coalición de Izquierda, con el emblema del Partido Comunista, obtuvo 705 mil votos, lo que le dio derecho a 18 diputados que integraron el grupo parlamentario comunista (Coalición de Izquierda). Luego, en la misma 51 Legislatura los mismos diputados constituyeron ?noviembre de 1981? el grupo parlamentario del PSUM. El compañero Arnoldo Martínez Verdugo fue electo como líder del primer puñado de luchadores de la izquierda que llegaron al Congreso. Ayer, el grupo parlamentario del PRD le hizo un homenaje.

Este grupo fue el más compacto, independiente y representativo de las inquietudes e intereses de importantes sectores de la nación, si se le compara con todos aquellos que se habían constituido en la Cámara en el pasado, después del Congreso Constituyente (1917) hasta la fecha. Claro, los perredistas de la 54 Legislatura y los de esta 58 sin duda han hecho su lucha y no quiero regatearlo, negando que en el curso de los debates de las distintas legislaturas haya habido diputados honestos que defienden los intereses populares y de la nación; pero es válido reconocer con toda conciencia que el grupo parlamentario comunista inició una nueva etapa en las deliberaciones del Congreso, desde aquel colegio electoral de agosto de 1979, cuando los presuntos legisladores de la izquierda, ya encabezados por Martínez Verdugo, remacharon en la tribuna sus discrepancias con el sistema electoral que permitía la autocalificación de las elecciones de diputados y senadores.
dracula
Desde entonces, en este asunto y en otros que hoy parecen novedad, la izquierda no quitó el dedo del renglón. Exigió la creación de un órgano autónomo del Ejecutivo y del Legislativo que organizara, vigilara y calificara los procesos electorales en México. Más de una década después de creó el Instituto Federal Electoral y, años más tarde, durante la elección federal de 2000, el IFE respondió por la integración del Congreso y la asunción al poder de un presidente ajeno a las siglas del más antiguo partido de Estado. La transición a la democracia no dio comienzo el 2 de julio de 2000; la izquierda comenzó la historia muchas décadas atrás, en la cárcel, en las calles, en la tribuna parlamentaria.

En la 51 Legislatura, la coalición de izquierda fue el grupo más homogéneo y solidario de la Cámara, a pesar de que sus diputados tenían distinto origen, militancia diferente y diversos estilos de trabajo político. Para muestra: Valentín Campa, Arnoldo Martínez Verdugo, Danzós Palomino, Gerardo Unzueta, Alejandro Gazcón Mercado, Evaristo Pérez Arreola, Othón Salazar, Gilberto Rincón Gallardo, Manuel Salcido, Roberto Jaramillo, Santiago Fierro, Antonio Becerra Gaytán, Pablo Gómez, Sabino Hernández Téllez, Fernando Peraza, Carlos Sánchez Cárdenas, Ramón Sosa Montes, Juventino Sánchez Jiménez, Manuel Stephens García. Con todos ellos, la Cámara de Diputados comenzó a convertirse en un foro de auténtico debate político, en una tribuna para la confrontación de ideas y programas y para el análisis de los principales problemas del país.

La presencia en el Congreso de tan reconocidos personajes de la izquierda con otros actores políticos como era el líder parlamentario del PRI de aquellos tiempos, Luis M. Farías, los diputados José Angel Conchello y Jesús González Schmal, que luego abandonaron el PAN; Cuauhtémoc Amescua Dromundo, del PPS; Graco Ramírez Garrido Abreu, del PST, y hasta Carlos Enrique Cantú Rosas, del PARM, conformaron el primer grupo plural de legisladores que justificó plenamente la reforma política que presentó el secretario de Gobernación, Jesús Reyes Heroles, bajo la premisa (válida aún por estos días) de que "endurecernos y caer en la rigidez es exponernos al fácil rompimiento del orden estatal y del orden político nacional". Era abril de 1977. Guerrero. El Ejército combatía a la guerrilla del Partido de los Pobres, en la montaña.

La reforma política reyesherolista que abrió las puertas del Congreso a la Coalición de Izquierda, como bien decían Martínez Verdugo y otros camaradas, no fue una concesión graciosa. Fue el resultado de muy largos y duros años de lucha, no sólo de los comunistas por varias décadas proscritos, sino de muchos sectores de la sociedad. Fue "un proceso que costó vidas, pérdida de la libertad y que llevó a miles, millones de mexicanos, principalmente a jóvenes, a combates y acciones históricas como el movimiento estudiantil de 1968, un levantamiento en defensa de la democracia y en oposición a que nuestro país se deslizara a formas más autoritarias y represivas de dominación política".

Arnoldo Martínez Verdugo decía entonces: "la Cámara es para nosotros una tribuna desde la cual se defiende y propaga una concepción del mundo y un programa de transformaciones que cuentan con el apoyo de una parte significativa de la sociedad mexicana, pero también es un órgano desde el cual se puede influir para mejorar, aunque sea en una mínima proporción, el nivel de vida y los derechos políticos de la clase obrera y de toda la población explotada y oprimida". Y en razón ello, los diputados de la Coalición de Izquierda fueron más allá del ejercicio de la crítica al sistema y al gobierno en turno; más lejos que la mera confrontación ideológica o política con otros partidos. En el Diario de los Debates de aquellos días hay testimonio de los pronunciamientos de los diputados y del líder parlamentario de la Coalición de Izquierda contra la "modernización", luego transformada en globalización de los mercados. Hace más de 20 años, Martínez Verdugo llamó la atención: "la modernización propuesta no toma en cuenta la necesidad de mejorar el nivel de vida de los trabajadores, ni el ampliar las posibilidades de que los obreros puedan influir en la vida política y en las decisiones del Estado y de las empresas".

Quienes vivimos del oficio periodístico registramos que en la 51 Legislatura por primera vez, en instancias legislativas, la Coalición de Izquierda promovió la reglamentación del derecho a la información, recién integrado a las garantías constitucionales. Desde el colegio electoral de agosto de 1979, Arnoldo Martínez Verdugo exigió que los asuntos ventilados en la tribuna del Congreso tuvieran la mayor difusión en los medios. Más aún, propuso que los debates parlamentarios se transmitieran por radio y televisión, haciendo uso del 12.5 por ciento del tiempo de transmisión que por acuerdo presidencial las empresas mediáticas deben otorgar al Estado por el usufructo de las concesiones que les otorga el gobierno. Ya en el trabajo legislativo, los diputados de la izquierda presentaron una iniciativa que contempló la creación de un Consejo Federal de Comunicación Social para "romper el despotismo de los medios en la formación de la opinión pública". Hoy, en el tema sigue vigente en la agenda nacional.

EN 3 TIEMPOS

1DICEN LOS QUE SABEN que ahora sí los priístas están en problemas. No hay línea ni alguien en Los Pinos que les diga cómo hacerle en la rebatiña de votos. Y es que en su domingo 7 (noviembre de 2000), Zedillo les dijo cómo y cuántos, levantó la mano de su candidato Labastida y puso en orden a Madrazo, Bartlett y Roque. Los irredentos priístas lo saben bien: desde Los Pinos, Zedillo asumió un liderazgo virtual, depositó toda su confianza en el PRI y los priístas no lo defraudaron: contaron 10 millones de votos y todos contentos. Por cierto, nadie se explica y mucho menos en el CEN del PRI explican cómo es que las actas de escrutinio del Distrito Federal no están en el PREP de Roque Villanueva. Bueno, tampoco aparecen con Beatriz, y Madrazo sólo muestra la suma de unas cuantas. ¡Ah! Pero todos esparcen la especie en los medios: las huestes de López Obrador y Bejarano ayudaron a los adversarios del tabasqueño; ¿será?

2Como si la agenda nacional estuviera vacía, ahora el presidente Fox nos recetará varios días (o semanas) de discursos promocionales del valor del PIB a precios de mercado. Y es que el lunes pasado, el INEGI anunció que el valor en dinero del producto nacional (lo que producimos todos, todos los mexicanos que algo hacemos por la patria) llegó en 2001 a 5 billones 771 mil 857 millones 224 mil pesos. Esta cifra tiene un valor estimado en 5.1 por ciento más que el año 2000, a pesar de la recesión de la economía. Y Fox se llena la boca con el numerote, porque según el Banco Mundial (de tanto respeto en Los Pinos) el ingreso per cápita en México sería de 6 mil 200 dólares al año. El monto, dicen, es superior del ingreso promedio de los latinoamericanos. ¡Ah! Pero muy, muy por debajo de los 34 mil dólares mensuales del ingreso de un ciudadano del primer mundo.

3Por cierto, con los escándalos en el PRI y en la PGR pocos advierten que en el último encuentro de líderes empresariales con los "hombres del Presidente" en la Secretaría de Economía, se entregó a los industriales un subsidio estimado en 750 millones de pesos. Y es que el secretario de Hacienda y el de Economía acordaron cumplirles el compromiso de bajar a tres dólares el BTU de gas natural. Hoy se les cobra a 4 dólares y Gil Díaz con Ernesto Martens ofrecieron que Pemex financiará el dólar de diferencia de aquí hasta 2006 y si se puede hasta 2007 a una tasa de 7 por ciento anual. Pero los industriales dijeron no. Lo quieren todo, tal como se hizo con los refresqueros, a quienes un acuerdo presidencial los beneficio con la quita de 20 por ciento de impuesto a los refrescos endulzados con fructosa. A cambio, los azucareros (con todo y el plan ansiado ayer) salen perjudicados con más de 350 millones de pesos... unas por otras.

Ilustración: Paul Flora / Serie: Tiempo de vampiros

Fax: 5262 4317 [email protected]

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