Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Martes 26 de febrero de 2002
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Mundo

El presidente George W. Bush se cuenta entre sus opositores, según la Casa Blanca

Analiza el Pentágono eliminar la oficina que difundiría información falsa en el extranjero

El secretario de la Defensa ordenó evaluar la labor de la instancia y decidir si es necesaria

AFP

Washington, 25 de febrero. El Pentágono analizará la eliminación de una oficina encargada de acciones de propaganda sobre la "guerra contra el terrorismo", que incluía en sus funciones la difusión de noticias falsas en el exterior, y que ahora cuenta entre sus opositores al propio presidente estadunidense, George W. Bush.

El secretario de la Defensa, Donald Rumsfeld, dio instrucciones a su subsecretario a cargo de Política Pública, Douglas Feith, para que evalúe el trabajo de la Oficina de Influencia Estratégica (SIO, por sus siglas en inglés) y decida si es necesaria, dijo este lunes la portavoz del Pentágono, Victoria Clarke.

Informó que Rumsfeld pidió que se revise minuciosamente el rol de la oficina, "y uno de los asuntos a ser considerados es si debe existir; hay muchas preguntas, muchos asuntos y mucha preocupación".

Luego, la Casa Blanca expresó sus propias preocupaciones, insistiendo en que Bush nada sabía sobre la creación de la SIO, hasta que se enteró de la misma por un reportaje publicado la semana pasada por el diario The New York Times.

Funcionarios del Pentágono, que pidieron el anonimato, confirmaron al diario que la SIO elaboró propuestas para una amplia campaña destinada a influir en la opinión internacional sobre la "guerra contra el terrorismo", incluyendo la distribución de información falsa en medios extranjeros.

"Creo que es justo decir que el presidente tendría problemas con cualquier oficina que, como parte de su política pública, no distribuya la verdad y los hechos", dijo el lunes el portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer, al revelar la oposición de Bush a la creación de la polémica oficina.

"Eso es a lo que el presidente cree que los portavoces gubernamentales, los funcionarios de relaciones públicas del gobierno y el gobierno deben dedicarse: a la distribución de la verdad", agregó el portavoz presidencial.

Al revelarse la información la semana pasada, Rumsfeld prometió que ni el Pentágono ni sus contratistas le mentirían al público o distribuirían informes falsos. "Creo que la persona a cargo (de la SIO) debe estar debatiendo incluso si debe existir en su forma actual, dada la desinformación y la publicidad adversa que ha recibido", dijo Rumsfeld el domingo a la cadena estadunidense NBC.

El subsecretario de Defensa a cargo de Política Pública, Douglas Feith, quien salió este lunes hacia Moscú para reunirse con sus colegas rusos, revisará el asunto que se le encomendó cuando regrese del viaje, agregó Clarke, y aclaró que su conocimiento sobre la SIO es "extremadamente limitado".

La oficina fue creada semanas después de iniciada la campaña militar estadunidense en Afganistán, para contrarrestar "las mentiras que los talibanes y Al Qaeda están publicando" sobre la guerra, dijo la portavoz.

Dirigida por el brigadier general de la Fuerza Aérea, Simon Worden, la SIO responde a Feith, a cargo de Política Pública, aunque en el organigrama depende de la Secretaría de la Defensa para Operaciones Especiales y Conflictos de Baja Intensidad.

Feith dijo a la prensa la semana pasada que la SIO fue creada para manejar y coordinar toda la información que se ofrece sobre operaciones militares, mediante volantes, emisiones radiofónicas e información acerca de recompensas, así como para contrarrestar la propaganda enemiga y elaborar técnicas de engaño.

Los funcionarios del Pentágono, comenzando por Rumsfeld, dieron como ejemplo de la desinformación que supuestamente quieren combatir, los rumores que circularon a principios de la guerra en Afganistán, que indicaban que las raciones de comida lanzadas por Estados Unidos sobre el país estaban envenenadas.

Tanto Rumsfeld como Feith enfatizaron en que aunque no le mentirían a la prensa o al público, utilizarían el engaño a su favor como técnica de guerra.

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