Funcionario del ISSSTE se suicidó en una iglesia

Ť Dos de las misivas están dirigidas a González Roaro, a quien pide ayudar a su familia

SUSANA GONZALEZ G.

Iba rumbo al aeropuerto, pero ordenó a su chofer detenerse en una iglesia de la zona de San Angel, donde luego de rezar algunos minutos se dio un tiro en la cabeza.

Rafael Degollado Nava, quien se desempeñaba como delegado regional del ISSSTE en Baja California Sur, escogió la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, localizada en la glorieta de Plaza Valverde, de la colonia Guadalupe Inn, para suicidarse.

Aún se desconocen los motivos que tuvo para quitarse la vida, a pesar de que dejó tres cartas póstumas. Dos de ellas están dirigidas al director general del organismo, Benjamín González Roaro, y la tercera tiene como destinatario el senador Joel Ayala, quien también es dirigente sindical de los burócratas.

El contenido de las misivas, escritas con letra manuscrita y firmadas por Rafael Degollado, no fue dado a conocer completamente por las autoridades, pero la Fiscalía Desconcentrada de la PGJDF en la delegación Alvaro Obregón reveló que la posdata escrita en el anverso de una de las dos cartas destinadas al titular del ISSSTE rezaba: "Todo va a salir bien en el congreso".

Tampoco se sabe todavía si el ex funcionario se refería al 13 Congreso Nacional Ordinario del Sindicato del ISSSTE, que se llevará a cabo este fin de semana y en el cual se nombrará la nueva dirigencia gremial. Esa carta también incluía una frase que aludía a "lo cansado que estaba de tanto lidiar".

Otro sentido tenía la misiva que Degollado Nava dejó a Joel Ayala, dirigente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), quien es oriundo de Mexicali, Baja California, entidad donde laboraba el fallecido, pues trascendió que al legislador sólo le pedía ayudar a su familia.

Las autoridades también encontraron unas hojas sueltas entre las pertenencias de Degollado Nava, donde se despedía de su esposa "Lupita".

El chofer del delegado del ISSSTE, cuyo nombre no fue revelado, declaró ante el Ministerio Público que muy temprano recogió a Degollado Nava en un Spirit blanco ?se desconoce si el vehículo es propiedad del instituto o del funcionario? para llevarlo al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, pues tenía un vuelo programado a las 10 de la mañana.

Dijo que lo notó muy nervioso, y en más de dos ocasiones Degollado Nava le pidió que cambiara de rumbo hasta que llegaron a la colonia Guadalupe Inn, donde al pasar frente a la parroquia referida quiso que se estacionara. Ahí el funcionario descendió del vehículo y se metió al templo. Eran aproximadamente las nueve de la mañana.

Rafael Degollado salió dos veces del recinto, pero volvió a entrar, pero luego de que ingresó por tercera ocasión a la parroquia, aproximadamente a las 9:25 horas, el chofer escuchó un disparo, y al meterse al lugar para verificar lo que había pasado vio a su patrón tendido sobre el piso, cerca de la puerta, con la cabeza ensangrentada.

En la parroquia se encontraban algunos feligreses, quienes refirieron que en una de las ocasiones en que Degollado entró a la iglesia se puso a rezar durante algunos minutos, pero después, cuando ya estaba cerca de la puerta principal, sacó una pistola para dispararse en la sien izquierda.

El lugar fue desalojado y cerrado de inmediato, mientras peritos de la procuraduría capitalina levantaban el cuerpo e iniciaban las pesquisas. La pistola con la que se mató Degollado Nava fue una Smith & Wesson, calibre 38 milímetros, y la investigación quedó a cargo de la 24 agencia del Ministerio Público bajó el número AO/4T0/106/02-02.