Analizan legisladores exigir a Muñoz Leos una política de sueldos equitativa en Pemex

 ANDREA BECERRIL

A propuesta del PRD, la Comisión Permanente del Congreso de la Unión analiza enviar un exhorto al director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Raúl Muñoz Leos, para que se frene el despido de personal en la paraestatal, sobre todo de 3 mil profesionistas a los que se pretende recortar. Los diputados y senadores pedirán también que explique el porqué de una política salarial que beneficia sólo a mandos superiores.

La iniciativa, de la diputada Magdalena Núñez Monreal, está en comisiones de la Permanente y se espera que se apruebe el próximo miércoles, a fin de exigir a Pemex una política salarial y de pensiones equitativa y congruente, que asegure la permanencia de trabajadores calificados en la paraestatal.

La legisladora explicó que mientras en agosto de 2001 se revisó el contrato colectivo de los trabajadores petroleros y los sindicalizados obtuvieron un incremento directo al salario de 8.5 por ciento y una promoción de niveles salariales, que en promedio representan un aumento total a sus percepciones de 15 por ciento, ese mes Pemex elevó los ingresos de los mandos superiores de la empresa en más de 50 por ciento.

Ello, debido a que se les aumentó la compensación y el incentivo al desempeño hasta en 120 por ciento, homologando además los niveles del 39 al 43 del tabulador, con un pago retroactivo a enero del año pasado, beneficios que en conjunto significan un incremento superior a 50 por ciento del ingreso total que perciben esos funcionarios.

De esos beneficios fueron excluidos también 25 mil trabajadores de confianza, de los niveles 29 al 38 del tabulador, quienes sólo tuvieron aumento de 8.5 por ciento en compensación e incentivo.

Explicó que también se marginó de esa revisión a los 55 mil jubilados petroleros, quienes únicamente recibieron el aumento de 8.5 por ciento a sus pensiones y una ayuda "extraordinaria" de sólo seis pesos en promedio.

Esas condiciones de "discriminación salarial", ya que se hace a un lado "a quienes constituyen la inteligencia operativa, de servicios y administrativa" de Pemex, han dado lugar a un movimiento de defensa de los intereses de los profesionistas de confianza de la paraestatal, agregó.

La Unión Nacional de Trabajadores de Confianza de la Industria Petrolera, agregó Núñez Monreal, solicitó desde octubre dialogar con la directiva de Pemex, pues además del trato salarial discriminatorio de que son objeto, se ha sumado el aviso verbal de que se suprimirán unas 3 mil plazas de trabajo, precisamente en los niveles 29 al 38.

"El adelgazamiento injustificado de las plantillas de profesionistas en nuestras industrias estratégicas ha sido un pésimo negocio para el país y, en cambio, ha rendido jugosos dividendos a las trasnacionales, al tener que comprar posteriormente a Pemex el producto del trabajo de miles de profesionistas separados de la misma, muchos de quienes pasan a ser empleados por contratistas de la paraestatal".

Advirtió que, para seguir cumpliendo con sus objetivos estratégicos, la industria petrolera nacional debe ofrecer a sus trabajadores un trato justo y equitativo.