La refriega en San José de Gracia, Michoacán, donde habrían asesinado a 17 personas el pasado domingo, fue producto de una pugna interna en el cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), entre Alejandro N, El Pelón, y Abel N, El Toro, líderes de plaza en ese sitio, expuso el subsecretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana federal, Ricardo Mejía Berdeja, quien descartó la versión de un fusilamiento, como se difundió en redes sociales.
En la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador de ayer, el funcionario argumentó que “no se tiene una certeza ni un número (de víctimas); ya empezaron a llegar algunas denuncias anónimas de posibles lugares donde pudieron haber depositado los cuerpos”, expuso.
Dijo que a las autoridades les llama la atención la forma como se limpiaron las “emasculaciones (manchas) hemáticas, con aparatos y agua para borrar evidencias”. También confirmó que no hay denuncias sobre personas de la comunidad desaparecidas, por o cual se infiere que las víctimas eran de otras regiones.
Mejía Berdeja describió, con ayuda de láminas, que no hubo una alerta del ayuntamiento de Marcos Castellanos ni de seguridad pública. “El móvil que hemos ubicado es una posible venganza entre grupos que dependen de la misma estructura criminal.
“El día de los hechos, aproximadamente a las 15:20 horas, se realizaba el funeral de la señora Elisa, madre de Alejandro N, quien falleció a consecuencia de una enfermedad. Hay dos testimonios que refieren que hubo detonaciones, que hubo un enfrentamiento.”
Sobre la relación entre Alejandro N y Abel N, precisó que el primero comenzó su carrera criminal a los 18 años, como sicario del cartel de Los Zetas, La familia michoacana, los caballeros templarios y luego el CJNG. Abel fue reclutado por él.
Alejandro fue detenido y Abel tomó control de San José de Gracia; desde entonces se advirtió a El Pelón que ya no regresara a dicha comunidad, ubicada en el municipio de Marcos Castellanos.
En 2018, Ricardo, hermano de Alejandro, fue asesinado por órdenes de Abel. En diciembre de 2021, ya fuera de prisión, El Pelón asesinó en venganza a José N, hermano de Abel.
El Toro advirtió a El Pelón que lo asesinaría. El día del velorio Alejandro llegó al funeral con unos 15 pistoleros. Y la misma familia lo confrontó porque sabía de las amenazas; pero según él “tenía permiso” para estar en el funeral.
Minutos después “llegan varias camionetas con sicarios, al frente Abel, y someten a los acompañantes de Alejandro, los desarman y los colocan, como aparece en algunos videos”, narró el funcionario.
El subsecretario de Seguridad Pública describió una fotografía en donde se observa a El Pelón haciendo llamadas; sin embargo, Abel, según testigos, le disparó y lo mató.
El funcionario reiteró que no hubo fusilamiento. “No se puede apreciar que haya habido una sola línea” en las paredes, sino que los sicarios empezaron a disparar, pero “no hubo, digamos, una acción sincronizada.
“Lo que sí podemos advertir es que, efectivamente, hubo lesiones, hubo gente afectada, hay huellas hemáticas, hay balas percutidas de diferente calibre y con todo eso se va a seguir investigando”.
En tanto, unos 400 elementos de la Guardia Nacional, de la fiscalía y de la policía estatales iniciaron la madrugada del lunes una operación en los alrededores de San José de Gracia, informó Seguridad Pública de la entidad. Recorren la vecina localidad de Jiquilpan y los límites con Jalisco. San José de Gracia, localidad de unos 10 mil habitantes, se localiza a un kilómetro de dicho estado.
El despliegue por tierra y aire cuenta con apoyo de drones.
Con información de Ernesto Martínez, corresponsal