Pacientes vienen para atenderse en centros locales porque aquí les resulta más barato
Martes 21 de abril de 2020, p. 17
Mexicali, BC., El Congreso de Baja California propuso como una medida emergente para mitigar y contener la importación de Covid-19 por el traslado de residentes entre California y Baja California la instalación de filtros sanitarios para la detección de personas enfermas que cruzan la frontera para atenderse en territorio mexicano.
De manera tradicional, el cruce por los seis puertos binacionales se estima en 100 casos diarios, aunque en la actualidad se ha reducido a 10 por ciento. Baja California ocupa tercer sitio a nivel nacional por contagios de coronavirus y segundo en muertes, la mayoría de ellos en Tijuana.
El presidente del Congreso, Luis Moreno Hernández, pidió la intervención del canciller Marcelo Ebrard para proponer esta medida que podrá identificar y aislar a personas que continúan importando el virus SARS Cov-2 a las ciudades fronterizas de Baja California
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La decisión de la Secretaría de Salud federal de no instalar mecanismos de control fronterizo ha facilitado en semanas recientes a ciudadanos estadunidenses que crucen sin restricción, en contraste con el impedimento a turistas mexicanos.
Luego de apuntar que mientras los bajacalifornianos se quedan en casa, se mantiene alta a dinámica de movilidad transfronteriza, Moreno Hernández expuso que la Secretaría de Salud estatal ha detectado casos de estadunidenses confirmados como pacientes de Covid-19 que cruzan la frontera hacia México para atenderse en los centros locales de salud al carecer de cobertura médica o por el alto precio de la atención médica en Estados Unidos.
Esta situación podría generar el resurgimiento de un brote de Covid-19 y el endurecimiento de las medidas de aislamiento con el deterioro económico y comercial para la región.
Hace dos semanas se instalaron filtros sanitarios para inhibir el acceso carretero al puerto de San Felipe, una zona turística ubicada en el Mar de Cortés. Este lunes se instalaron filtros para inhibir el viaje al puerto de Ensenada desde la frontera con Estados Unidos, aunque incluye también a residentes de Mexicali y Tijuana.