Nuevas pugnas entre las pandillas Los Aztecas y La Línea –que forman parte del cártel de Juárez–, en contra de Los Mexicles, bajo las órdenes del cártel de Sinaloa, ha generado una ola de violencia que se enmarca en el control de las rutas de trasiego de drogas hacia Estados Unidos y los mercados de narcomenudeo en Ciudad Juárez, Chihuahua, afirman integrantes del gabinete de Seguridad Nacional.

En las recientes semanas, las detenciones de líderes regionales de La Línea y de grupos vinculados al cártel de Sinaloa, así como las ejecuciones ocurridas en las prisiones chihuahuenses, han desatado la violencia, señalaron los funcionarios.

Las fuentes consultadas refirieron que las pandillas han retomado el control de algunas prisiones en Chihuahua y desde allí hay presos que controlan a los grupos y están empujando acciones violentas contra los rivales, lo que también ha desembocado en el asesinato de personas ajenas a las actividades de la delincuencia organizada.

Entre las detenciones más importantes que se han realizado se encuentran las de Julio César N, El Sexto o El Sixto, y Juan Carlos López, identificados como dos de los líderes de la banda Gente Nueva que operan en Chihuahua y que sirve al cártel de Sinaloa. En tanto que por lo que hace a La Línea, en un operativo de fuerzas federales se logró la captura de Carlos Arturo Quintana, El 80, quien fue aprehendido el pasado 18 de mayo en el Chihuahua.

Las autoridades entrevistadas señalaron que en esta disputa también el cártel Jalisco Nueva Generación que dirige Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, juega un papel importante ya que ha extendido su presencia a Ciudad Juárez y está vinculándose con las pandillas que no trabajan para el cártel de Sinaloa, lo que también ha generado violencia en esa franja fronteriza con Estados Unidos y diversas zonas de Chihuahua.