Sidronio Casarrubias Salgado, identificado por la Procuraduría General de la República (PGR) como uno de los jefes de Guerreros unidos, principales participantes en la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, de Ayotzinapa, Guerrero, fue exonerado del delito de portación ilegal de armas de fuego, tras acreditar que los elementos que lo detuvieron falsearon datos acerca del momento de su aprehensión y también porque habría sido objeto de actos de tortura.

El juzgado segundo de distrito en materia penal, con sede en Toluca, estado de México, determinó absolver a Casarrubias Salgado al considerar que su detención se realizó cuando transitaba en un vehículo y en su interior trasladaba armas de fuego, también consideró que la captura se realizó un día antes de lo reportado por las autoridades.

De acuerdo con los antecedentes del caso, Casarrubias Salgado fue aprehendido el día 16 de octubre de 2014, y no el día 16, y tampoco se le detuvo durante una revisión vehicular realizada en la carretera México-Toluca en el tramo de la capital mexiquense, sino en el interior de un domicilio.

Todos esos elementos fueron analizados por el juez de distrito y con base en ello revocó la sentencia que se le había dictado al presunto líder de Guerreros unidos, a quien se le menciona en la indagatoria iniciada por la PGR como uno de los responsables de ordenar la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, luego de que fueron privados de su libertad en el municipio de Iguala.

Sin embargo, Casarrubias Salgado no será puesto en libertad ya que enfrenta otros cargos relacionados con el llamado caso Iguala.