Integrantes de la Misión de Observación para Chilapa y Chilpancingo, Guerrero, creada por la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todas y Todos, condenaron los homicidios de los hermanos Lázaro y Germán Sánchez Reyes, perpetrados el jueves de la semana pasada en un lugar público de Chilapa. Ambos eran medios hermanos de Miguel Sánchez Mateos, quien fue víctima de desaparición forzada el 12 de diciembre de 2014.

Los miembros de esta red, que agrupa a 84 organizaciones de 23 estados del país, señalaron que estos crímenes resultan terriblemente emblemáticos de una situación de riesgo en estas ciudades, la cual fue documentada por la misión de observación los días 19 y 20 de septiembre.

Grave resulta que ambos jóvenes hayan sido asesinados con armas punzocortantes y de alto calibre, pero que esto haya ocurrido en un sitio público frecuentado por las personas jóvenes de ese municipio, como son las canchas deportivas, lo convierte en un mensaje amenazante para toda la población y envía una preocupante comunicación sobre la inacción de autoridades del estado en dicha ciudad.

De acuerdo con los primeros reportes, los jóvenes habrían sido asesinados por integrantes del crimen organizado.

Los defensores de derechos humanos manifestaron preocupación por la integridad de los habitantes de la región y en especial de los colectivos que trabajan en favor de las garantías fundamentales en la zona.

“De la misma manera, conscientes del carácter multifactorial que configura este estado de cosas, reiteramos nuestra disposición para reagendar a la brevedad la reunión pospuesta con el gobernador, Héctor Astudillo –la cual se había concretado durante la misión de observación–, para conocer de primera mano su diagnóstico y estrategia para afrontar esta grave crisis de derechos humanos que afecta también la gobernabilidad democrática de Guerrero”.