Río de Janeiro. El famoso estadio Maracaná de Río de Janeiro quedó ayer a oscuras debido a una disputa sobre pagos morosos del servicio eléctrico. La empresa agregó que le deben 3 millones de reales (unos 940 mil dólares), de los cuales 1.3 millones de reales (410 mil ) pertenecen a un consorcio que administra el inmueble, dirigido por la empresa constructora Odebrecht. El resto pertenece a los organizadores de los Juegos Olímpicos de Río 2016. El Estado ha declarado una calamidad financiera y tiene un retraso de meses en el pago de salarios a empleados públicos, como maestros, enfermeros, así como en las pensiones.