Luego de asegurar que la Federación Internacional de Natación Amateur (FINA) está actuando de manera antideportiva al suspender de forma temporal a la Federación Mexicana de Natación (FMN), su presidente, Kiril Todorov, informó que este martes renunciará al cargo de vicepresidente del comité técnico de natación de la entidad mundial.

El federativo expuso que hasta ayer no había recibido ninguna notificación oficial de la FINA sobre la suspensión temporal, la cual sólo ha conocido por medios electrónicos.

Además, su titular, el uruguayo Julio César Maglione, se adelantó a la resolución de la Corte de Arbitraje Deportivo, donde todavía se estudia la demanda por 5 millones de dólares de penalización que impuso al país la organización internacional.

Explicó que México hasta el momento ha dado a la FINA alrededor de 262 millones de pesos a cambio de nada, luego de la cancelación del Mundial de Natación, que se llevaría a cabo en Guadalajara en 2017, y todavía demanda 5 millones de dólares adicionales, cuando sabe que la FMN no tiene recursos para cubrir ese pago.

Intereses políticos

El federativo no descartó que haya intereses políticos más allá de los económicos, que pueden venir de mexicanos, porque el próximo año serán las elecciones para renovar la organización que preside, y aunque no dio nombres, lamentó que Jesús Mena, siendo director de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) y miembro de la FINA, haya permitido que esta situación escalara al punto donde está ahora.

En su oportunidad, José Ávila Farca, coordinador de Normatividad y Asuntos Jurídicos de la Conade, dijo que la FINA pretende chantajear al gobierno de México con este asunto, a unos meses de los Juegos Olímpicos, aunque aceptó que si la Corte de Arbitraje Deportivo así lo determina, entonces se deberá pagar la sanción impuesta.

El funcionario insistió en que no debió firmarse el contrato para realizar el Mundial porque resultaba leonino (muy desventajoso para el país) y que tampoco debió cancelarse de la forma en que se hizo, por lo que ahora deberán estar atentos a la resolución que se tome en el ámbito internacional y aceptarla.

Ávila Farca agregó que serán llamados a deslindar responsabilidades todos los involucrados en la firma del contrato con la FINA y su posterior anulación –Bernardo de la Garza, quien pidió a Todorov que solicitara la sede del Mundial, y Jesús Mena, quien lo canceló–, ya que no se debe actuar de esa forma.