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Ver día anteriorDomingo 21 de octubre de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
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Infancia y Sociedad

Programas para el GDF

C

on esperanzas bien fundadas, hemos enviado al doctor Miguel Ángel Mancera algunas ideas de programas para su gobierno, en favor de niños y jóvenes de la ciudad de México. Las grandes metas de esos programas son: abolir el trabajo infantil en la capital y que todo menor de 18 años esté integrado a una escuela tradicional o alternativa. Porque así estaremos poniendo a salvo a los menores de ser reclutados por alguna organización delincuencial o explotadora del trabajo infantil.

Será necesario por ello integrar un padrón de menores de 18 años que permita saber dónde están y qué hacen, ya que a partir de eso se pueden diseñar políticas asertivas de acercamiento y de oferta de oportunidades efectivas y atractivas. Así, el GDF podrá conocer la situación concreta de cada menor, para que sus políticas tengan una base real y objetivos concretos a corto plazo.

La meta es que en la ciudad de México no haya un solo niño sin escuela o sin familia, para lo cual se puede diseñar un sistema de grupos de convivencia que den cobijo moral y social a todo menor abandonado.

Se intentará abolir el trabajo infantil en la capital para superar la paradoja de desempleo con explotación infantil: trabajo para los adultos y escuela para los menores.

Hemos propuesto también la creación de policía especializada, de modo que nadie, sin entrenamiento especial, pueda detener a un menor, tal como se hace en Suecia y otros países desarrollados. Así se evita la mancuerna que a veces existe entre policía y delincuencia organizada para involucrar a los menores.

También hemos propuesto que se dé seguimiento puntual a los programas de nutrición y de combate a la obesidad infantil.

Otro programa importante consiste en ofrecer a los y las adolescentes programas de sexualidad y reproducción, para que adquieran hábitos de salud y desarrollen una temprana conciencia sobre las responsabilidades que significa ser padres, de modo que no se comprometan con ello sin estar listos. Así se evitarán maternidades tempranas, a veces productoras de niños maltratados o abandonados.

Hace unos días, Miguel Ángel Mancera hizo público su interés en conversar con el rector José Narro para ponerse de acuerdo en aumentar las oportunidades de educación superior para los jóvenes, y yo quisiera pedirles a ambos no dejar de mirar por ello a la infancia. Si bien hacen falta científicos y doctores para el desarrollo del país, parece más urgente aún que no haya analfabetismo y que no falte educación básica a ningún niño mexicano. Empecemos por la capital del país.