Alrededor de cien policías de tránsito fueron distribuidos a lo largo del corredor de la Línea 4 del Metrobús –Buenavista a San Lázaro–, para concientizar a los automovilistas de que a partir del 30 de marzo, cuando entrarán en operación los 46 autobuses largos, no se permitirá la ocupación de los carriles confinados ni las vueltas a la izquierda; de hacerlo, serán multados y remitidos al corralón.

Las unidades del servicio de transporte colectivo que circulaban por Ayuntamiento, El Salvador y el circuito del Zócalo debieron cambiar ruta. La Secretaría de Transportes y Vialidad no avisó que ya era prohibido seguir nuestros recorridos y nos obligaron a continuar por Artículo 123, que iba al tope y sin pasajeros, porque la gente ni siquiera sabía, comentaron algunos operadores.

La instrucción recibida es orientar a los conductores sobre cómo usar el corredor desde Puente de Alvarado, donde se divide en dos rutas, y en las calles del Centro Histórico, donde los ambulantes han tomado los cruces de Eje Central con su mercancía o motos; detectar los puntos conflictivos y evitar accidentes, tan comunes con la entrada en operación de cada línea, señalaron los uniformados.

Vecinos y comerciantes del centro exigieron a las autoridades apurar el inicio de operaciones del Metrobús, cumplir con la ruta de carga y descarga de mercancía y con los apoyos a microempresarios.