La maratonista Madaí Pérez regresó a los entrenamientos con ánimos renovados y con la mira puesta en el ciclo olímpico que comenzará a finales de este año, una vez planificado su programa de competencias internacionales, con la promesa de mejorar mis resultados.

Luego de su participación en los Juegos Olímpicos de Pekín en agosto de 2008, donde terminó en el lugar 15, Madaí se embarazó y agradece a las autoridades deportivas que no le retiraran su beca de 18 mil pesos mensuales que recibe del fideicomiso Compromiso Integral de México con sus Atletas (CIMA).

La ganadora del tercer lugar del maratón de Boston 2007 (2:30.16) y número uno de la clasificación nacional con el récord mexicano de 2:22.59 realizado en Chicago 2006, comentó que tener asegurado el apoyo de CIMA durante su embarazo le dio tranquilidad.

Vía telefónica comentó: “ha sido una buena ayuda, porque no tienes que estar preocupándote para comer, a veces uno (como corredor) compite cada fin de semana para conseguir dinero.

Estoy empezando de cero, el atletismo es mi profesión. Mi objetivo siempre ha sido el de mejorar cada día. Mi máxima ilusión, como la de todos los atletas, es conquistar una medalla olímpica, dijo la maratonista.

Al margen de los nulos resultados que se han obtenido en el atletismo de fondo y recientemente de lo ocurrido en el Mundial de Berlín, Madaí consideró que hace falta cantera nueva, de gente que vaya despuntando, porque eso permitirá un futuro deportivo mejor y sólo trabajando en equipo en todos los niveles funcionará.

No se siente decepcionada de lo que sucede en el entorno de su deporte, porque como mexicana mi país lo es todo y lo único que puedo hacer es trabajar, manifestó, aunque no pasó por alto que si Tlaxcala se ha convertido en cuna de fondistas ha sido por las ganas de sobresalir.