Usted está aquí: jueves 13 de octubre de 2005 Cultura El mundo necesita más músicos sin importar el género: Sun Young-Lee

Este fin de semana ocupará el podio de la OFUNAM en la sala Nezahualcóyotl

El mundo necesita más músicos sin importar el género: Sun Young-Lee

En 10 o 20 años habrá más mujeres dirigiendo, sólo es cuestión de tiempo, expresa

La directora coreana fue finalista del concurso internacioal Eduardo Mata en 2003

FERNANDO CAMACHO SERVIN

Ampliar la imagen La amistad entre los integrantes de la Orquesta Filarm�a de la UNAM es parte de su encanto, pues esa es una cualidad muy rara en el mundo, expresa la directora coreana Sun Young-Lee, quien por primera vez dirigir�n programa con m� de Maurice Ravel FOTO Carlos Cisneros Foto: Carlos Cisneros

En la música, como en el resto de las artes, hay intérpretes buenos y malos. Y el mundo está necesitado de buenos músicos, que sepan dar energía y color, sin importar si son hombres o mujeres.

Así opina la directora coreana de orquesta Sun Young-Lee, quien este sábado y domingo conducirá a la Orquesta Filarmónica de la Universidad Nacional Autónoma de México (OFUNAM), con un programa dedicado a piezas poco conocidas de Maurice Ravel, ''un reto para los músicos, para mí como directora y también para el público".

En entrevista con La Jornada, Sun (Corea, 1967), finalista del Concurso Internacional Eduardo Mata de Dirección de Orquesta 2003 y una de las batutas más interesantes de la escena musical actual, habla de la fuerza que la mueve, su forma de ''leer" a los músicos de un ensamble y de su amor simple por compartir los sonidos con otros seres humanos.

Dirigir no es una cuestión de género

Egresada con honores de algunos de los más prestigiados colegios de música del orbe, entre ellos los conservatorios nacionales superiores de París y Reims, Francia, la directora coreana ha llamado poderosamente la atención por su estilo ''vigoroso y fuerte".

Domina instrumentos tan disímbolos como el piano, la viola y el fagot, y entre sus maestros figuran Yuri Termirkanov, Sébastien Bérraud y Manuel Rosenthal. Aunque se ha ganado un lugar de privilegio en un ámbito todavía dominado por los hombres, Sun afirma que ser mujer nunca representó una dificultad especial.

''El trabajo del director es muy difícil, no es cuestión de ser hombre o mujer, ni tampoco de edad. Ser mujer es sólo una pequeña parte de todo, no la más importante. En este momento hay más hombres dirigiendo, pero en 10 o 20 años habrá más mujeres. Es sólo una cuestión de tiempo.

''Hay muchas directoras de Europa y Estados Unidos (Marin Alsop, Emmanuelle Haim, Rebeca Miller o Susanna Mälkki) que han hecho un buen trabajo, y yo sólo las estoy siguiendo", dice.

-En pleno siglo XXI, ¿no debería haber más mujeres dirigiendo?

-No, lo que hace falta son más músicos y directores buenos, no importa si son hombres o mujeres.

''Mi manera de dirigir es diferente, porque es mía, no porque yo sea mujer. Esta es una labor muy personal.''

De carácter amable, Sun se entusiasma al decir que se dedica a la música porque ama a sus semejantes, tocar el alma con ella y, simplemente, divertirse.

Por eso dejó de ser solista en la música de cámara para dedicarse a compartir las notas con cien personas más, en vez de sólo dos o tres.

La fuerza que imprime a sus obras se genera de la propia música y de la energía que haya en cada ciudad, y la de México le despierta ánimos distintos, porque ''aquí la gente está despierta, es amigable y tiene otras facetas de luz y oscuridad".

El color, la intensidad y Ravel

-¿Cómo es su trabajo con los músicos, cómo los maneja?

-Cuando conozco a la orquesta, en los primeros 10 minutos trato de captar qué clase de músicos son, ''leerlos" y ver qué clase de color pueden dar, para sacar la música de ellos.

''La OFUNAM es una orquesta muy agradable. Desde el inicio puedes encontrar que hay mucha amistad, y eso es parte de su encanto. Es raro encontrar eso en el mundo y es una gran cualidad.

''Ahora voy a presentar a Ravel, porque tiene mucho color y es muy difícil, más que Gustav Mahler o Anton Bruckner. Su música es tan compleja y tan intensa, que si pierdes una parte, cada instrumento lo resiente.

''Es un gran reto para los músicos, para mí y también para el público. Esta es la primera vez que presento un programa de este tipo y tengo curiosidad por ver cómo lo va a recibir el público."

Al mando de la OFUNAM y con el suizo Homero Francesch al piano, Sun Young-Lee ofrecerá un programa exclusivamente con música de Maurice Ravel, integrado por Rapsodia española, Concierto para piano en sol mayor, Valses nobles y sentimentales y Gaspard de la nuit.

La cita es este sábado a las 20 horas y el domingo a las 12 horas en la Sala de Conciertos Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario (Insurgentes sur 3000, CU).

 
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