Rivera Carrera y la arquidiócesis expresan su rechazo

Inadmisible, el uso de balas de goma en contra de migrantes

JOSE ANTONIO ROMAN

Aunque todos los Estados tienen el derecho de cuidar sus fronteras y ordenar la inmigración, también tienen la ''estricta obligación'' de respetar los derechos humanos de los migrantes, incluso de aquellos que pretenden ingresar ilegalmente a su territorio, aseguró el arzobispo primado de México, cardenal Norberto Rivera Carrera.

Al comentar el uso de balas de goma por policías de Estados Unidos en contra de migrantes mexicanos que pretendan cruzar ilegalmente territorio estadounidense, el prelado dijo que ambos países no pueden sacrificar la dignidad de las personas por cuidar los límites de una frontera.

En términos más directos se pronunció la arquidiócesis primada de México, que a través del editorial de su semanario Desde la Fe dijo que de ninguna manera debe avalarse el uso de la violencia en contra de nuestros connacionales -ni de ningún ser humano-, como se entiende en el acuerdo bilateral firmado con Estados Unidos en 2001, en el que la Secretaría de Relaciones Exteriores, en una "actitud inadmisible", aceptó que la Patrulla Fronteriza utilice armas no letales en contra de los migrantes. ''Por ningún motivo debió permitirse que los mexicanos fueran agredidos'', señala.

Entrevistado luego de su acostumbrada misa dominical en la Catedral Metropolitana, el cardenal Rivera comentó que el Congreso ya solicitó la comparecencia del secretario de Relaciones Exteriores, Luis Ernesto Derbez, a fin de abordar el tema, aunque recordó que fue su antecesor, el canciller Jorge Castañeda, quien firmó el acuerdo bilateral en el que el gobierno mexicana avala el uso de esas armas en contra de nuestros migrantes.

Por otra parte, el prelado se refirió al tema del pacto social. Dijo que este deseo se ha manifestado por el presidente Vicente Fox; el jefe del Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, miembros de la iniciativa privada y legisladores. "Ojalá que se llegue a concretar para bien de México; un pacto social es fundamental para el país, sería muy benéfico para la gobernabilidad y el progreso de México."

No obstante rechazó que a la sociedad civil o a otros sectores sociales, incluyendo a la Iglesia católica, le corresponda hacer la convocatoria para dicho pacto. ''Esta responsabilidad corresponde solamente al gobierno federal y esperamos que de ahí venga la convocatoria'', dijo el cardenal Norberto Rivera.

Interrogado sobre la jubilación de Alejandro Gertz Manero para dejar la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno federal, el jerarca eclesiástico precisó que lo importante en la historia del país y de las naciones son las personas, pero lo más importante son las instituciones. Explicó que los institutos siguen y las personas van pasando al dar su contribución a la historia, y en el caso de Gertz Manero, quien ya se jubiló, ya dio su contribución a México y vendrán otras personas que cumplan su trabajo.

Titulado ''Por una reforma migratoria justa y sensible", el editorial del semanario católico señala que la considerable falta de fuentes de empleo, la injusta distribución de la riqueza y las casi nulas oportunidades de tener una vida digna hacen que nuestro país sea un importante generador de migrantes hacia Estados Unidos.

Exhorta a las autoridades de ambos países a trabajar decididamente para atenuar los conflictos derivados del proceso migratorio, que incluyen desde luego la cooperación para el respeto de los derechos humanos de los migrantes.